El fabricante de productos de consumo Unilever ha registrado una caída en el beneficio neto atribuido de 5.625 millones de euros al cierre del año 2019, lo que supone un 40% menos respecto al ejercicio precedente, según informó la multinacional en un comunicado.
No obstante, la cifra de negocio entre enero y diciembre aumentó un 2%, hasta los 51.980 millones de euros. Por segmentos de negocio, la facturación de la división de productos de belleza e higiene aumentó un 6%, hasta los 21.868 millones de euros, mientras que las ventas del segmento de alimentación cayeron un 4,6%, hasta los 19.287 millones de euros y los ingresos del área de limpieza del hogar crecieron un 6,9%, hasta los 10.825 millones de euros.
Por zonas geográficas, América registró un incremento en sus ventas del 2,9%, hasta los 16.482 millones de euros. Europa, por su parte, disminuyó su facturación un 6%, hasta los 11.269 millones de euros, y Asia, África, Oriente Próximo y Rusia experimentaron un incremento de las ventas del 5,5% hasta los 24.129 millones de euros.
Tal y como ha señalado el CEO de la compañía, Alan Jope, “en 2019, logramos un crecimiento de ventas subyacente de 2,9%, equilibrado entre precio y volumen, un año más de buen margen y progresión de ganancias, y un fuerte flujo de caja libre. Vimos un fuerte crecimiento en los mercados emergentes y en nuestra división de atención domiciliaria. El crecimiento general estuvo ligeramente por debajo de nuestro rango guiado para el año debido a la desaceleración que vimos en el cuarto trimestre”.
“En 2020, se espera que nuestro crecimiento de ventas subyacente se ubique en la mitad inferior del rango multianual del 3-5% y se ponderará en la segunda mitad. Si bien esperamos una mejora desde el cuarto trimestre de 2019 hasta el primer semestre de 2020, el crecimiento subyacente de las ventas del primer semestre será inferior al 3%”, ha añadido.