La marca de agua mineral Bezoya, perteneciente a Pascual, donará el equivalente al beneficio de la venta de medio millón de sus botellas de un litro y medio para ayudar a los afectados por la erupción del volcán de La Palma. Esta iniciativa se llevará a cabo gracias a la colaboración de la compañía con la organización sin ánimo de lucro Cáritas Diocesana de Tenerife.
Esta alianza no es reciente. Pascual y Cáritas colaboran para mejorar la vida de las personas desde 2017, cuatro años en los que ambas han desarrollado diferentes proyectos de inserción social y ayuda a los más necesitados, como la construcción de pozos para el suministro de agua potable en África desde la Fundación Tomás Pascual y Pilar Gómez-Cuétara.
Por otro lado, el verano pasado Bezoya donó 24.000 litros de agua mineral a los pueblos afectados por los graves incendios que se produjeron en la provincia de Ávila. Además, durante la crisis sanitaria, una de las acciones más destacadas fue el reparto de más de un millón de desayunos para los colectivos más desfavorecidos por la Covid-19. Sin olvidar la donación de un millón de litros de agua mineral para cubrir las necesidades básicas de la población más vulnerable durante la primera ola de la pandemia, junto a Cruz Roja y Aneabe.
Por su parte, Cáritas Diocesana de Tenerife continúa haciendo una labor imprescindible con su campaña de emergencia y solidaridad con La Palma, afectada desde hace dos meses por la erupción del volcán de Cumbre Vieja. La entidad ha atendido directamente a más de 160 familias y cerca de 600 personas damnificadas.