Los productos con marca de distribuidor cada vez ganan más importancia en la cesta de la compra. Tanto es así que, actualmente, ya representan el 52%. Además, más del 40% del gasto que realizan los consumidores en alimentación se corresponde con productos con marca de distribución (MDD). Y no solo eso, sino que la mayoría de los consumidores aseguran estar dispuestos a aumentar este consumo.
Así se desprende del estudio elaborado por el supermercado Aldi y la consultora Kantar Wordpanel, en el que se achaca este crecimiento a la buena relación calidad-precio de los productos con marca de distribuidor y al impacto del Covid-19 en los ingresos de tres de cada 10 consumidores.
En dicho documento se refleja que las categorías que más aumentan, en más de un 30%, son los pescados y mariscos congelados, los embutidos y los quesos y las conservas. “Todo apunta a que estos porcentajes seguirán creciendo”, asegura José Luis Díez, director gerente de Autor Foods, empresa especializada en la elaboración de legumbres cocidas. “Los impactos económicos de la pandemia ya se están notando y cerca del 40% de los consumidores han reducido su gasto en alimentación, por lo que el precio va a ser un factor decisivo de compra”.
Motivo por el que, considera, los grandes distribuidores reforzarán sus marcas propias existentes y/o crearán otras nuevas en categorías claves. “Esto les permitirá crear relaciones duraderas y de confianza con los proveedores para garantizar la máxima calidad al mejor precio posible”, sostiene Díez.
Su planteamiento se basa en su propia experiencia, ya que buena parte de las legumbres cocidas y conservas vegetales de Autor Foods sale al mercado con marcas de distribuidor. “Probablemente, este sea uno de los mejores momentos para iniciar el lanzamiento de productos de alimentación con marca de distribuidor. Especialmente en el sector de las legumbres cocidas”, afirma el director gerente de Autor Foods.
Por qué crear una MDD y cómo hacerlo con éxito
Crear una MDD no es solo buscar un nombre y diseñar una bonita etiqueta. Hay que encontrar un fabricante que cumpla con la calidad que espera el mercado y que se comprometa con la nueva insignia como si fuese suya.
En el caso de las conservas de legumbres, Díez explica que en Autor Foods acompañan, asesoran y apoyan a sus clientes en todo el proceso porque su premisa es crear relaciones win to win que se mantengan a lo largo del tiempo.
“Una de las cuestiones más importantes a tener en cuenta a la hora de elegir al fabricante de una MDD son las certificaciones alimentarias, como la International Featured Standards (IFS)”, comenta. En el caso de Autor Foods, su puntuación IFS es de 98,62 sobre 100, lo que les sitúa a la cabeza de la seguridad alimentaria en el sector.
Del mismo modo, Díez explica que son muchos los beneficios de contar con una MDD. Entre ellos menciona la oportunidad que supone encontrar un nicho de precios bajo o la capacidad de los distribuidores para negociar con otros proveedores ya que, al disponer de un producto propio, los proveedores se verán obligados a aportar un extra.
Pero, precisa, toda la implantación debe hacerse con una buena estrategia en la que entra en juego muchos factores, como el precio. “Hay que crear la imagen de marca, estudiar la competencia y analizar los datos propios. Solo así se logrará el éxito”.