En las últimas semanas, los mercados de abastos de Madrid han multiplicado esfuerzos para servir a la sociedad en plena pandemia, garantizando en todo momento el abastecimiento y aportando alternativas como la compra online, los pedidos telefónicos, el reparto a domicilio y el click&collect para evitar aglomeraciones. Opciones enfocadas a todos los públicos, pero especialmente destinadas a los colectivos más vulnerables.
De este modo, intentan solventar las dificultades que están teniendo “dentro de esta complicada situación producida por el Covid-19, pero con un hándicap añadido más, y es el hecho de que todos los comerciantes que conforman un mercado deben ponerse de acuerdo para trabajar unidos y en una misma línea”, señala Carnimad, la Organización que representa a los carniceros y charcuteros de Madrid.
En concreto, en Madrid existen 45 mercados municipales, a los que dan vida los profesionales que conforman el comercio especializado. Todos ellos en tiempo récord, liderados por de la Dirección General de Comercio y Hostelería del Ayuntamiento de Madrid y por sus gerentes, se han organizado para extremar, aún más, la limpieza continua de sus instalaciones, no solo los puestos, sino escaleras, ascensores, pasillos y un largo etcétera; han puesto marcadores en el suelo para ayudar al cliente a mantener las distancias de seguridad y cartelería informativa en los distintos puestos; están informando al consumidor en todo momento y en directo a través de las redes sociales; y, a pesar de que la mayoría han reducido su horario comercial para cuidar la seguridad de sus clientes y trabajadores, siguen dando servicio por las tardes a través del teléfono, correo electrónico e incluso páginas web.
Así, Carnimad asegura que ahora mismo el click&collect es una de las opciones más utilizadas para los que sí pueden y prefieren salir a comprar. “Muchos establecimientos que permanecen cerrados al público por la tarde, se dedican durante este horario a preparar los encargos que la gente va a recoger al día siguiente. De esta forma, evitan aglomeraciones porque tienen el pedido preparado y solo tienen que pagar y llevárselo. Además, nuestros profesionales están recomendado el pago con tarjeta, y gracias a ello el proceso también es más rápido y más seguro”, explica.
¿Venta por Internet en un mercado tradicional?
Además, los mercados están trabajando principalmente a través de tres webs de venta online: Mercado 47, la plataforma que pusieron en marcha desde el Ayuntamiento y Hermeneus World para facilitar la transformación digital al comercio tradicional de Madrid; Amazon, solo en el caso del Mercado de la Paz, primer mercado en el mundo que vende frescos a través del gigante de Internet; y lacompraasidagusto.com, otra plataforma que agrupa a puestos de diferentes mercados y ofrece compra por recetas.
No hay que olvidar que la clientela media de los mercados suele ser de una edad avanzada, aunque esto está empezando a cambiar y que precisamente los mayores son los más vulnerables frente al Covid-19, pero en muchas ocasiones no son usuarios de Internet. Ante ello, desde Carnimad explican que muchos de sus profesionales que se encuentran en mercados se han organizado con otros empresarios del mismo espacio comercial, para facilitar el encargo telefónico a los clientes y hacerles llegar la compra completa, con productos de los distintos puestos, en un solo envío, del mercado a su casa, evitándoles que tengan que salir.
A este respecto, Fernando Gutiérrez, director-gerente del Mercado de las Águilas, cuenta que, en su mercado, los pedidos realizados a través del teléfono se han multiplicado casi un 1000%, y que el 80% de las personas que realizan estos encargos son mayores de 70 años. Añade, además, que “entre los productos que más demandan están todos los de carnicería, charcutería, pollería y frutería, aunque en general todos los frescos están consiguiendo buenas ventas a través de este servicio”.
Pese a este aumento exponencial en los encargos por teléfono, Fernando explica que en las ventas en general se vivió una primera semana de crisis en la que estuvieron vendiendo al nivel de Navidad, pero después la demanda bajó mucho. Sin embargo, asegura también que “es lo normal y lo que debe ser, porque la gente tiene que estar en su casa y salir para comprar solo cuando sea necesario”.
Mercedes Moyano, gerente del Mercado de Antón Martín, entiende y apoya que haya que ser responsables y quedarse en casa, pero asegura que “las informaciones mediáticas han contribuido a llenar los supermercados, dejando de lado a los mercados de abastos que son los que más control sanitario tienen y en donde menos riesgo de contagio hay, porque el producto solo lo manipula el profesional que hay detrás, y lo hace siguiendo unas exigentes medidas higiénico-sanitarias”.
Moyano, además, apunta que hay mercados como el suyo, que actualmente cuentan con un porcentaje de puestos gastronómicos muy alto, en su caso de casi el 50% y que estas actividades ahora permanecen cerradas, con la consiguiente pérdida de tránsito de personas en el espacio comercial. Esto unido a que la mayoría de sus comerciantes especializados vendían mucho a hostelería y ya no lo pueden hacer, está afectando a muchos comercios tradicionales. Frente a esto pide a todos los madrileños que se replanteen sus compras en este periodo de confinamiento, que se acuerden de los mercados de abastos donde se encuentra el producto fresco de calidad, de la mano de los comerciantes que siempre han estado y siguen estando para ellos, y que se pregunten “¿qué sería Madrid sin sus comercios?”.