Los españoles se guían por el precio cuando compran, algo que se ha acentuado con el contexto de alta inflación que vivimos actualmente. En este sentido, para casi el 50% de los españoles el precio es lo más relevante a la hora de comprar por delante de la calidad nutricional o de que el alimento sea fresco. De hecho, la mitad de los españoles reconocen haber cambiado la composición de su carrito por la subida de precios de los últimos meses.
Así lo recoge el informe “Percepción vs realidad en los hábitos de alimentación de los españoles: Análisis de la percepción de la calidad de la dieta de la población frente a la realidad de sus hábitos de dieta, cocina y compra” elaborado por Vivaz, la marca de seguros de salud de Línea Directa Aseguradora, y presentado este miércoles por Juan Revenga, uno de los nutricionistas más reputados de España y asesor de Vivaz en materia de alimentación.
La encuesta también revela que, a la hora de elegir establecimiento, el 60% de los españoles prefiere comprar en el supermercado frente a otras superficies como el mercado, que tienen, siempre, una mayor proporción de productos frescos y de temporada. La principal razón por la que los españoles deciden su lugar de referencia es la cercanía y la comodidad (63%). Además, casi la mitad de los españoles (48%) no se fija en la información nutricional etiquetada en los productos.
Abuso de ultraprocesados y platos preparados
El informe de Vivaz demuestra también que existe una fuerte disonancia entre la percepción y la realidad en los hábitos de alimentación de los españoles. Y es que, el 76% de los españoles valora su dieta de notable o sobresaliente y todos se aprueban holgadamente, con un 7,3 de media. Sin embargo, uno de cada tres adultos (13,2 millones de españoles) admite consumir ultraprocesados tres o más días a la semana, casi 24 millones (el 66% de los encuestados) afirma comer platos precocinados y uno de cada 10 pide comida a domicilio dos o tres veces a la semana o más.
La elección de ultraprocesados, comida preparada y a domicilio frente a la tarea de cocinar es especialmente alarmante en los más jóvenes (de 18 a 29 años). Casi la mitad consume ultraprocesados tres días o más a la semana; muy por encima de la media (un tercio) y un 80% de consume platos precocinados todas las semanas. Además, un 18% pide comida a domicilio dos, o tres veces a la semana o más, dato que casi duplica la media nacional (10%).
“La mala alimentación es un reflejo de la transformación y los hábitos sociales actuales”, ha señalado Revenga, que afirma que el cambio en los ritmos laborales y las diferencias socioeconómicas de los ciudadanos hacen que la industria ofrezca alternativas más cómodas en apariencia, pero poco saludables, como los ultraprocesados o las comidas preparadas y, por tanto, la población deje de dedicar tiempo a la cocina.
La falta de tiempo y el desconocimiento son las principales razones que esgrimen los españoles para no cocinar de forma diaria, al menos así lo afirman seis de cada 10 adultos. De hecho, el estudio realizado confirma que sólo el 28% de los españoles cocina a partir de alimentos frescos (verduras, legumbres, carne, pescado o huevos) todos los días. Esta situación pone de relieve, además, el poco tiempo que dedican los españoles a enseñar a los niños esta actividad porque sólo el 7% involucra a los más pequeños de la casa en la cocina.
Por Comunidades Autónomas, los habitantes de Islas Baleares (73%), Madrid (72%), Cataluña y Canarias (71%) son quienes consumen más platos precocinados más de una vez a la semana en comparación con la media nacional (66%). Mientras, los gallegos (39%), cántabros (52%) y asturianos y vascos (55%) son los que consumen menos platos precocinados. Estos resultados ponen de manifiesto que en el norte se comen menos platos precocinados que en el conjunto de España mientras que el arco mediterráneo (centro y este peninsular junto con las islas) se opta en mayor medida por las comidas preparadas, según se desprende de las respuestas de los encuestados.
Sólo dos porciones de frutas, verduras y hortalizas al día
Según ha recordado Revenga, una pieza de fruta es menos calórica, más saciante y nutricionalmente mucho más positiva que cualquier snack ultraprocesado. Sin embargo, sólo el 4% de la población come al menos cinco piezas entre frutas, verduras y hortalizas al día, recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), siendo dos porciones diarias lo más frecuente (23%).
De igual modo, la población española no incluye en su alimentación buenos hábitos duraderos, sino que decide ponerse a dieta a pesar de su demostrada ineficacia para mantener los objetivos a medio y largo plazo. Tanto es así que, según los datos del estudio de Vivaz, y en consonancia con otros estudios científicos, en torno a seis de cada 10 españoles afirma haber estado a régimen alguna vez y la mitad de los que han hecho dieta ha engordado.