El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) del mes de septiembre se sitúa en 80,7 puntos, lo que supone 5,3 puntos por debajo del dato del mes anterior. Este nuevo descenso del índice se debe a la evolución negativa de sus dos componentes: el índice de situación actual baja 6,4 puntos y la valoración de las expectativas presenta un descenso de 4,3 puntos. De esta forma, el índice vuelve a situarse en valores similares a los registrados en los primeros meses del año 2014, tal y como ha publicado este lunes el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
En relación con el mes de septiembre del pasado año la evolución es también negativa, aunque el descenso es mayor. El ICC desciende desde septiembre del pasado año 9,9 puntos, con una pérdida en términos absolutos para la valoración de la situación actual de 6,2 puntos y de las expectativas, que ofrecen un descenso más acusado, de -13,5 puntos. En términos porcentuales el perfil de la evolución registrada es similar, con un descenso del ICC de un 12,2% como resultado de la pérdida del 8,1% en la valoración de la situación actual y de la caída del 15,9% en las expectativas.
En concreto, el índice de valoración de la situación actual alcanza en septiembre los 76,7 puntos, un descenso de 6,4 puntos con relación al obtenido el pasado mes de agosto. Esta evolución de la situación actual es el resultado de un comportamiento negativo en la valoración de todos sus componentes; así, la valoración de la evolución general de la economía disminuye 7,2 puntos, la valoración del mercado de trabajo desciende 7,7 puntos y la percepción de la situación de los hogares baja en 4,3 puntos.
En relación con los datos de septiembre de 2018 la evolución es negativa en todos sus componentes salvo en los referidos a la situación de los hogares. Así, la valoración de la situación económica desciende 12,1 puntos en relación a la de hace un año, las opciones que ofrece el mercado de trabajo se valoran 8,9 puntos por debajo del valor de hace un año, mientras que la situación en los hogares todavía muestra un aumento de 2,3 puntos en los últimos doce meses. Si analizamos la evolución en términos relativos las diferencias son muy similares: desde septiembre de 2018 la valoración de la situación económica general desciende un 15,7%, la valoración de las posibilidades del mercado de trabajo ha bajado un 10,9%, mientras que la valoración respecto a la situación de los hogares aumenta un 2,6%.
En cuanto al índice de expectativas, llega en este mes a los 84,7 puntos, con un descenso de 4,3 puntos, un 4,8% en porcentaje, respecto al mes precedente. Este descenso se debe a la evolución negativa de sus tres componentes, aunque son las bajas expectativas sobre el futuro de la economía las que ofrecen caídas de mayor intensidad. Así, las expectativas sobre la situación futura de la economía descienden 7,5 puntos, las relativas al mercado de trabajo ofrecen un descenso de 2,4 puntos y las expectativas respecto a la evolución de los hogares se sitúan en 2,9 puntos por debajo del dato del mes de agosto.
En términos interanuales, los datos de expectativas vuelven a mostrar una evolución negativa en todos sus componentes. Desde septiembre del pasado año, las expectativas respecto a la situación económica del país han descendido en 16,1 puntos, mientras que las referidas al futuro del empleo tienen un descenso aún mayor, 21,3 puntos. Por su parte, las expectativas de los hogares permanecen más estables con una bajada de -3,1 puntos. En porcentaje, las expectativas respecto de la situación económica general bajan un 17,6%, las referidas al empleo descienden un 22,2% y la valoración de la situación de los hogares cae un 2,9%.