Este miércoles entran en vigor las nuevas normas de la UE destinadas a capacitar a los consumidores para que actúen a favor de la transición ecológica. Esto significa que antes de comprar un producto, los consumidores recibirán información mejor y más armonizada sobre su durabilidad y reparabilidad.
Los consumidores también estarán mejor informados de sus derechos en términos de garantías legales. Además, se prohibirán las afirmaciones ambientales vagas, lo que significa que las empresas ya no podrán afirmar que son «verdes» o «ecológicas» si no pueden demostrar que realmente lo son.
También estará prohibido exhibir logotipos de sostenibilidad voluntaria que no sean fiables. Además, se prohibirán las prácticas comerciales desleales relacionadas con la obsolescencia temprana, como las afirmaciones falsas sobre la durabilidad de un bien.
Vera Jourová, vicepresidenta de Valores y Transparencia, afirmó que “empoderar a los consumidores para la transición ecológica consiste en dar a los ciudadanos europeos las herramientas para tomar decisiones informadas y evitar que prácticas como el lavado verde y la obsolescencia temprana se utilicen en el mercado único».
Por su parte, Didier Reynders, comisario de Justicia, ha añadido que “gracias a estas nuevas normas, los consumidores recibirán ahora respuestas a preguntas como: ¿Es realmente sostenible el producto que quiero comprar? ¿Puedo elegir un producto diseñado para durar? ¿Es fiable la declaración medioambiental del producto? Esta es una excelente noticia para animar a todos los consumidores a participar en la transición ecológica”.
Los Estados miembros deben transponer esta directiva a su legislación nacional antes del 27 de marzo de 2026. Las normas se aplicarán a partir del 27 de septiembre de 2026.