El Congreso del Pan, Copan21, que se ha celebrado entre los días 2 y 4 de marzo, ha acogido a las principales voces de los sectores de la panadería, bollería y pastelería en un encuentro en el que se ha reivindicado la reactivación del consumo de pan, especialmente entre la población menor de 35 años, a través de nuevas variedades y en base a argumentos nutricionales.
Organizado por la Asociación Española de la Industria de Panadería, Bollería y Pastelería (Asemac) e Ifema, el evento fue sido inaugurado por el director general de la Industria Alimentaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, José Miguel Herrero, que ha destacado el aumento del consumo de pan integral en más de un 12% en el año 2020. “Los últimos datos de que disponemos indican un cambio de tendencia en el consumo del pan. Estamos viendo consumidores muy interesados en este producto y estamos viendo el renacer de las panaderías en las grandes ciudades, que ofrecen nuevas variedades, nuevos productos, nuevos panes…”.
Herrero también quiso poner en valor la norma de calidad del pan y habló de las oportunidades que tiene el sector para reactivar el consumo del pan. “Estamos ante los ciudadanos mejor informados de la historia. Los ciudadanos leen las etiquetas, buscan información a través de prescriptores e internet de cómo alimentarse mejor y son conscientes de que la alimentación influye en su salud y que deben llevar un estilo de vida saludable”, aseguró.
También participaron en el evento Mercedes Ruiz, de la consultora Aestivum, quien hizo una aproximación a la actual situación del mercado de los cereales, y Ramón Sánchez, presidente de Incerhpan, que ha presentado los resultados de la campaña “¡Buenos días con pan!” desarrollada por la Organización Interprofesional de Cereales Panificables y Derivados. Por su parte, Antonio Escribano, médico especialista en Endocrinología y Nutrición, ha pedido a los consumidores que vayan más allá del perfil energético de alimentos como el pan, que continúa en la base de la pirámide alimenticia: “Hay que prestar atención a la parte funcional, bioquímica de la alimentación”. En el encuentro también se ha podido escuchar a de Pedro Suárez, de Ramón y Cajal Abogados, que ha hablado de la nueva normativa sobre prácticas desleales en la cadena alimentaria.
Visión sectorial de la cadena
Rafael Juan, CEO de Vicky Foods, afirmó durante su participación que la parte de la industria vinculada a la hostelería ha estado muy afectada por el confinamiento, así como por los cierres perimetrales y sectoriales. La exportación, por otro lado, se ha visto beneficiada en este periodo hasta el punto de que “hemos tenido que suprimir referencias de menor rotación para suministrar los pedidos que teníamos.
Por su parte, Aurelio Antuña, director general del Grupo Monbake, incidió en el hecho de que “la industria de las masas congeladas se ha visto afectada por la dependencia de la hostelería y la tienda tradicional y porque en el retail se está reduciendo la frecuencia de compra y la cantidad comprada, lo que afecta a su vez a los productos de compra diaria, como la panadería fresca”.
Por su parte, María Martínez-Herrera, responsable de seguridad alimentaria y medio ambiente de Asedas, reclamó una transición justa en el modelo de envases. “Entendemos que hay un uso abusivo de los plásticos, pero no podemos olvidar sus peculiaridades de cara a la seguridad alimentaria”, ha recalcado. Por su parte, Víctor Sánchez, director de Operaciones de “La Mafia Se Sienta a la Mesa”, aportó datos sobre el crecimiento de la venta online. “Antes de la pandemia el delivery era ya notable. Nosotros ya en pandemia hemos multiplicado el delivery por siete y el take away por once”.
Miguel Moreno, empresario gastronómico de pastelería, ha manifestado que la venta que han perdido las cafeterías por los cierres y las limitaciones “la estamos ganando los artesanos en las tiendas de proximidad, sobre todo los que están haciendo los deberes y han sabido adaptar sus productos a las demandas de los consumidores”. Por último, Fernando Moner, presidente de la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU), ha reconocido que, aunque actualmente el consumidor ha cambiado sus hábitos, “en un alto porcentaje volveremos a hacer lo que hacíamos antes. Ahora bien, vamos a guardar especial cariño a quienes nos han respondido y a la responsabilidad social de las empresas que han estado ahí”.