El consumo de vino en España ha vuelto a superar el umbral de los 20 litros por persona y año, dato que no alcanzaba desde hace 12 meses. No obstante, esta «fuerte recuperación” del consumo de vino en España está todavía lejos de los niveles de diciembre de 2019 cuando se superaron los 23,4 litros per cápita.
Según los datos suministrados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv) sobre las estimaciones de consumo que se obtienen del “informe vitivinícola” (INFOVI) elaborado por el Ministerio de Agricultura, en los 12 meses hasta septiembre de este año, las salidas netas de vino al mercado nacional fueron de 978 millones de litros, lo que supone una notable recuperación desde los menos de 900 millones que apenas se dieron en el interanual a febrero. Dividido este nivel de consumo entre los 47,4 millones de habitantes que registra el INE como población española en el primer semestre de 2021, la cifra de consumo por persona y año se sitúa en los 20,63 litros.
Aunque una pequeña parte del total de los litros consumidos puede ir a turistas que visitan España, esta cifra es más de un litro y medio superior a la registrada a principios de este año, cuando apenas se rondaban los 19 litros por persona, pero todavía 2,8 litros inferior al récord alcanzado justo antes de la pandemia, cuando se superaron los 23,4 litros por persona.
El vino vuelve a ponerse de moda entre los españoles, con grandes innovaciones en vinos blancos, nuevas variedades de tintos, espumosos y vinos generosos, así como nuevas regiones productoras y variedades de uva, que se suman a las más consolidadas. Pero la pandemia y el confinamiento que se ha derivado de ella, supuso un fuerte revés a esta recuperación. La subida registrada durante el año 2020 en el consumo en los hogares a través del canal de la distribución, no compensó, ni de lejos, la caída registrada en hostelería, arrojando un saldo neto en 2020 del 17% menos.
Cuando se van superando los peores momentos de esta crisis, la recuperación paulatina del consumo en bares y restaurantes, así como la previsible vuelta del turismo, permiten observar cómo se retoma la senda alcista iniciada con fuerza en 2019.