Sociedades científicas, expertos en Salud Pública y Nutrición y organizaciones de consumidores han reclamado este martes en Madrid que el etiquetado Nutri-Score sea de obligada implementación “por su importancia y potencial como herramienta transversal de Salud Pública”.
En la clausura de la jornada Marta García Pérez, directora ejecutiva de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), ha dicho que “en la AESAN habíamos estudiado los diferentes etiquetados frontales, en especial los de los países de nuestro entorno y consideramos, entre ellos, N-S como el etiquetado frontal de interés, pues se sustenta en una fuerte evidencia científica. Esos estudios científicos demuestran la eficacia, lo que le ha hecho merecedor del apoyo por parte de la OMS-Europa”.
Por su parte, el doctor Miguel Ángel Royo, jefe del Área de Estudios de la Escuela Nacional de Sanidad del Instituto de Salud Carlos III, ha señalado que “Nutri-Score es una más de las políticas de Salud Pública necesarias para combatir la epidemia de obesidad y las enfermedades no transmisibles (ENT) asociadas a la alimentación no saludable, junto con las dirigidas a regular la publicidad, oferta y demanda de alimentos y bebidas no saludables. Estas políticas deberían necesariamente estar alineadas con políticas agroalimentarias que fomenten una producción sostenible de alimentos saludables”.
Nutri-Score es un logotipo basado en un código de letras y colores que se ubica en la parte frontal de los envases y tiene una doble vocación: informar al consumidor sobre la calidad nutricional global de los alimentos, permitiendo comparar productos y orientar sus decisiones de compra hacia aquellos de mejor calidad nutricional; e incitar a la industria a mejorar la calidad nutricional de los alimentos que fabrican ofreciéndoles la oportunidad de valorizar sus esfuerzos en términos de reformulación.
El objetivo es pedir a la Comisión Europea que imponga la inclusión del etiquetado Nutri-Score en los productos alimentarios para garantizar una información nutricional de calidad y proteger la salud de los consumidores europeos.
La portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Ileana Izverniceanu, ha hecho hincapié en la desinformación sobre la calidad nutricional de los alimentos a la que están expuestos los consumidores. “En OCU estamos convencidos que sumar información multiplica la salud”, ha declarado Izverniceanu, “los consumidores quieren saber lo que comen para poder comer mejor con una dieta completa y equilibrada. Por eso, desde nuestra organización pedimos que de forma obligatoria se adopte a nivel europeo un etiquetado frontal basado en Nutri-Score que garantice a los consumidores el acceso a la información nutricional de forma rápida, clara y sencilla”.
Asimismo, Itziar Marín, presidenta de la Confederación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Madrid (CECUMadrid), ha recordado que “el camino más fácil hacia la salud o la enfermedad es a través de la alimentación, y los consumidores deben disponer de información nutricional clara para cuidar su salud, evitando la enfermedad. Todas las encuestas nos hablan de necesidades claras en materia de transparencia en el etiquetado de los alimentos, por eso es imprescindible que a lo largo de esta nueva legislatura seamos capaces de dar un vuelco en materia de información a través del etiquetado y la publicidad, y Nutri-Score nos permite, sin duda alguna, avanzar en ese camino”.
Según los expertos, Nutri-Score estimula también a la industria a mejorar sus recetas ya que, para obtener una mejor puntuación, los fabricantes deben mejorar la calidad nutricional de sus productos. Desde la aplicación de Nutri-Score, más de 250 empresas del sector agroalimentario y de la distribución se han comprometido ya a poner este etiquetado en sus productos en Francia. Diferentes marcas se han comprometido también en otros países europeos y en España, entre ellas Eroski, Caprabo y Danone, entre otras.