El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 1% en marzo en relación al mes anterior y situó su tasa interanual en el 1,3%, casi un punto y medio superior a la registrada el mes anterior. Es la tasa más alta del índice general desde abril de 2019, según los datos publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que coinciden con los avanzados a finales del mes pasado.
En concreto, los grupos que destacan por su influencia en el incremento de la tasa anual son: transporte, cuya variación se incrementa cinco puntos, hasta el 3,8%, como consecuencia de las subidas de los precios de los carburantes y lubricantes para el transporte personal, que descendieron el año anterior; y vivienda, con una tasa del 4,3%, casi cinco puntos y medio superior a la del mes anterior, debida a los aumentos de los precios de la electricidad y, en menor medida, del gasóleo para calefacción, frente a las bajadas registradas en marzo de 2020.
Por su parte, los grupos con mayor influencia negativa son: comunicaciones, que refleja una variación del –4,9%, casi un punto y medio menos que en febrero, causada porque los precios de los servicios de telefonía y fax se mantienen estables este mes, mientras que se incrementaron el año pasado; y alimentos y bebidas no alcohólicas, cuya tasa desciende dos décimas y se sitúa en el 1,4%. Este comportamiento es consecuencia de la disminución de los precios del pescado y marisco, que subieron en marzo de 2020. Cabe reseñar también, aunque en sentido contrario, el aumento de los precios de las legumbres y hortalizas y la estabilidad de los precios de las frutas, frente a los descensos del año anterior.
La tasa anual del IPC aumenta en todas las comunidades autónomas en marzo respecto a febrero. El mayor incremento se produce en Castilla–La Mancha, con una subida de 1,8 puntos. Por su parte, Canarias es la comunidad donde menos se incrementa la tasa anual, con un aumento de ocho décimas.
En tasa mensual, los grupos con mayor repercusión positiva son: vivienda, cuya tasa del 3,3% es debida a la subida del precio de la electricidad y, en menor media, del gasóleo para calefacción; vestido y calzado, con una variación del 4,4%, que recoge el comportamiento de los precios al comienzo de la temporada de primavera-verano. Este grupo repercute 0,237 en el IPC general; y transporte, que presenta una tasa del 1,8% y una repercusión de 0,235. Esta evolución está causada, casi en su totalidad, por el incremento de los precios de los carburantes y lubricantes para el transporte personal.
Por otro lado, en el mes de marzo la tasa de variación anual del IPCA se sitúa en el 1,2%, casi un punto y medio por encima de la registrada el mes anterior. La variación mensual del IPCA es del 1,9%.