Caprabo estima un crecimiento significativo en las ventas del Mejillón del Delta, sello Reserva de la Biosfera de Terres de l’Ebre, para esta temporada. Concretamente, la compañía espera vender un 10% más que en la campaña del año anterior, que fue más breve a causa de las complicadas condiciones meteorológicas.
Durante los últimos años, la compañía de distribución catalana ha experimentado un incremento constante en la demanda de mejillones y las previsiones para esta nueva campaña sugieren que se mantendrá la tendencia. La temporada, que empezó la primera semana de abril, se alargará hasta finales de verano.
Además del crecimiento esperado en las ventas, Caprabo continúa trabajando en estrecha colaboración con los productores locales del Delta de l’Ebre para garantizar el abastecimiento de mejillones frescos y de alta calidad. En palabras de Fernando Tercero, responsable de Proximidad de Caprabo, “nuestro compromiso con la producción de proximidad nos permite ofrecer a nuestros clientes alimentos de alta calidad, fortalecer la economía regional y preservar los recursos naturales, tres aspectos clave en nuestra actividad. Como compañía, apostamos firmemente por el mejillón del Delta y creemos que, a pesar de que el año pasado su producción se vio muy afectada por el clima, el esfuerzo de nuestros proveedores se verá reflejado tanto en la producción como en las ventas”.
Mejillón DOP del Delta, sabor y frescura
La excelente calidad y la frescura del mejillón DOP con sello Reserva de la Biosfera de Terres de l’Ebre, lo han convertido en uno de los mariscos más populares y apreciados por los consumidores. Su sabor excepcional y sus propiedades nutricionales lo convierten en una elección recurrente para aquellos que buscan incorporar una opción saludable y sabrosa a su dieta.
El Delta de l´Ebre es la única zona de cultivo de mejillón de la costa catalana. Se siembra y cultiva el producto de forma artesanal respetando el medio ambiente en unas innovadoras infraestructuras que ponen en valor la recolección artesanal del producto y garantizan su calidad y proximidad. Los moluscos se crían en las bahías del Delta de l´Ebre con un filtro ecológico natural para el ecosistema deltaico que, además, captura una gran cantidad de CO₂ del aire.