Ocho de cada 10 empresas del gran consumo creen que la adaptación a nuevas normativas y leyes -como la Ley del cambio Climático o las regulaciones de movilidad sostenible- serán los factores que más impactarán en sus operaciones logísticas en un futuro próximo.
Según el informe ‘Perspectivas para la logística en el sector del Gran Consumo’, presentado en el 11 Congreso AECOC de Supply Chain celebrado en Madrid, además de la presión regulatoria, el 69% de las empresas cree que el precio de la energía y de los combustibles también condicionará el futuro de la logística, por un 53% que cita también el crecimiento el comercio digital como tercer factor con mayor impacto.
Estos factores condicionan las estrategias de las empresas. De hecho, el 71% de las compañías considera la transición hacia la logística sostenible y la rentabilidad de las operaciones como dos de los principales retos que deberán afrontar. Por encima de estos dos factores, el 82% de las encuestadas indica que entre sus principales preocupaciones está conseguir mantener el actual nivel de cumplimiento con sus niveles de servicio.
“Las empresas de gran consumo están centrando sus estrategias logísticas en la eficiencia, la digitalización y la sostenibilidad de la cadena de suministro, que son las herramientas que permitirán mantener la competitividad y el nivel de servicio actual tratando de minimizar el impacto de los cambios regulatorios y de la inflación”, ha explicado la directora de Logística y Transporte de AECOC, María Tena.
El barómetro, que recoge las valoraciones de los fabricantes, distribuidores y operadores logísticos líderes del gran consumo, apunta a que el 86% de las compañías espera un incremento en el precio del almacenaje y la manipulación y existe unanimidad al prever un incremento de los costes de transporte en los próximos años.
Otro de los focos del este informe es el impacto del comercio digital. La mitad de las empresas del gran consumo cree que las ventas por internet se mantendrán con una cuota de mercado de hasta el 3%, mientras que un 37% cree que crecerán hasta un 5%. Las ventas por internet también son un factor que explica que prácticamente todas las empresas encuestadas prevean un incremento en la demanda del transporte para 2022. En relación a los retos que afrontará el transporte por carretera, el 96% de las empresas cita la escasez de conductores, mientras que siete de cada 10 apuntan también a la reducción de emisiones y algo más de la mitad al precio del combustible.
El director general de AECOC, José María Bonmatí ha expresado el compromiso de la organización con “trabajar por una fiscalidad competitiva” y ha considerado que sin una buena comunicación entre empresas y administración “las regulaciones pueden tener efectos contrarios a los deseados e incidir en problemas actuales, como el incremento de costes”.
Es lamentable ver como las empresas dinamizadoras de la sociedad y economía, se doblegan a la manipulación de las ideologías e imposiciones de modelos de negocio que nos perjudica a todos, y que en absoluto tiene una base real.
Tanto en la gestión de la resiente crisis con el covid, como en las actuales «crisis» que se nos están vendiendo.
Se anhela el criterio, la independencia y la subordinación, qué en el fondo son el alma de cualquier ser o empresa!