CCOO se ha reunido este lunes con la directora general de Trabajo Autónomo, de la Economía Social y de la Responsabilidad Social de las Empresas y ha tenido acceso al escrito que el 1 de febrero envió a Servicarne y con el que abría el expediente de descalificación, lo que, según el sindicato, llevará a la empresa a dejar de ser una cooperativa.
Servicarne tiene ahora hasta el 19 de febrero para presentar alegaciones y el organismo dependiente del Ministerio de Empleo cree que el proceso terminará antes de que finalice el mes de abril. CCOO se ha personado como parte interesada en el expediente.
En el documento al que ha tenido acceso el sindicato se asegura que “el funcionamiento de Servicarne no se ajusta a las exigencias del derecho cooperativo y que solo responde a las necesidades de las empresas clientes”.
En el expediente también se afirma que la adhesión de los y las cooperativistas no responde a una decisión libre, si no a la necesidad de tener un empleo. Además, la Dirección General de Trabajo Autónomo apunta que la asamblea de Servicarne carece de garantías democráticas; que se trata de una organización piramidal y que las personas asociadas no pueden ejercer sus derechos de información y participación.
Además, añade CCOO, el Ministerio de Empleo afirma que “ha quedado demostrado que las condiciones de trabajo que fija son inferiores a las del personal asalariado de la industria cárnica; que Servicarne no realiza las actividades previstas en su objeto social; que es un mero intermediario para el suministro de fuerza del trabajo; que carece de medios materiales y organizativos y que no asume ningún riesgo empresarial”.
El sindicato recuerda que la propia Inspección de Trabajo emitió en julio un informe que daba la razón a CCOO y que concluía que no se trataba de una cooperativa de trabajo asociado. Ahora es la Dirección General de Trabajo Autónomo y Economía Social la que se ha propuesto acabar con esta situación.
“Gracias a la campaña contra el fraude que CCOO puso en marcha en el sector cárnico hace dos años, el sindicato ha logrado que sean dados de alta en el Régimen General de la Seguridad Social el 40% de los trabajadores y trabajadoras que estaban empleados bajo la figura del falso autónomo, alrededor de 7.500 personas. La mayoría estaban asociadas a Servicarne. Quedan alrededor de diez mil personas por regularizar, que carecen de derechos y que son mano de obra barata para las empresas cárnicas”, concluye el sindicato.