Los autónomos tienen puesta la mirada en la próxima campaña de rebajas donde esperan que el aumento del consumo por los usuarios en estas fechas señaladas, favorezca la consolidación del comercio de proximidad como alternativa al modelo de las grandes superficies. Así, desde la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE) hacen hincapié un año más en la necesidad de “apoyar al pequeño comercio” y como indica María José Landaburu, secretaria general de esta organización, “este apoyo no tiene que darse de forma eventual”.
UATAE reconoce la importancia de “arrimar el hombro” para que las micropymes y autónomos puedan competir frente a los grandes establecimientos, por eso recuerda Landaburu la importancia de “tejer redes de apoyo con el comercio de barrio que es el que garantiza crear espacios enriquecedores en nuestras ciudades y además dota de empleo de calidad al conjunto de la sociedad”. Como destacan desde esta organización, el pequeño comercio es el más sostenible de los modelos de consumo, porque cumple, entre otras cuestiones, con los Objetivos de Desarrollo Sostenible. “Apostar por el comercio de proximidad es sinónimo de posicionarse firmemente del lado de la sostenibilidad, del consumo responsable, de la conservación del territorio y de velar por la sostenibilidad”, añade Landaburu.
Es un sector estratégico que se ve sometido a una fuerte competencia de los grandes almacenes y que tiene que lidiar, además, con un modelo de consumo exacerbado donde las plataformas de venta online siguen ganándose su hueco debido a las opciones de inmediatez que ofrecen en los envíos, donde muchas veces se hacen uso de la lacra y fraudulenta figura de los falsos autónomos para alcanzar esta rapidez en las entregas.
Ante esta perspectiva, UATAE señala como prioridad “la defensa del pequeño comercio” y para ello, destacan la necesidad de reactivar el pequeño comercio a través del aumento de la protección social y ayudas para su mantenimiento, con medidas en la línea de creación de un plan integral de impulso del comercio de proximidad y “con la mirada puesta en caminar en la senda de una fiscalidad más justa”, así como, en “medidas de recuperación de la confianza del consumidor que permita nuestros barrios puedan seguir disfrutando de la vida que conceden los pequeños comercios”, sentencia Landaburu.