La OCU ha asegurado este vienes que el reciente hallazgo de una base de datos con más de 200.000 personas que publicaban reseñas falsas en los market places de Amazon a cambio de recibir productos gratis, viene a confirmar la denuncia de esta práctica realizada por esta entidad en 2019.
En aquel entonces, OCU detectó que el 8,4% de los productos que se vendían a través de Amazon estaba influida de manera significativa por opiniones interesadas, una circunstancia que también se producía en las páginas web de TripAdvisor y, en menor medida, de Booking.
Hasta ahora, la política de control de reseñas falsas por parte de Amazon se centraba en identificar a las personas que las realizaban, bloqueando sus cuentas de usuario. Parece que esta política está cambiando y la multinacional norteamericana está empezado a actuar también contra los principales responsables: los market places que incentivan este tipo de prácticas para mejorar su posicionamiento.
Aun así, OCU considera que” Amazon no está actuando con el suficiente interés, ya que el 71% de las tiendas denunciadas por esta organización en 2019 siguen activas”. De hecho, según una reciente encuesta de esta organización, tres de cada cuatro usuarios detectaron opiniones falsas o interesadas en las reseñas online, no solo de comercios, también en las webs de alojamientos.
Un problema que se ve agravado por el enorme peso que estas opiniones tienen en las decisiones de los consumidores (el 90% las consulta antes de contratar un producto o un servicio) y que tienen la capacidad de distorsionar el mercado. Por ello, exige a Amazon más controles a sus market places y vuelve a insistir una vez más a la CNMC y al Ministerio de Consumo para corregir este problema.
La respuesta de Amazon
A este respecto, Amazon ha señalado que quiere que sus clientes “compren con confianza sabiendo que las reseñas que leen son auténticas y relevantes”. Para ello, señala que tiene “políticas claras tanto para las personas que escriben las reseñas de producto como para nuestros colaboradores comerciales; dichas políticas prohíben la alteración de las funciones de nuestra comunidad. Tomamos acciones contra aquellos que violan nuestras políticas que pueden implicar la suspensión o eliminación de sus cuentas o el inicio de acciones legales”.
Su objetivo, añade, es “asegurarnos de que los clientes vean reseñas auténticas y relevantes para que puedan tomar decisiones de compra mejor informadas. Para hacer esto, utilizamos herramientas de machine learning y contamos con un equipo de investigadores que analizan semanalmente más de 10 millones de reseñas para detener las que no cumplan nuestros requisitos antes de que se publiquen”.
Además, “monitoreamos todas las revisiones existentes en busca de señales de comportamientos inadecuados y tomamos medidas rápidamente si encontramos un problema. También trabajamos de manera proactiva con las distintas redes sociales para denunciar a aquellos actores que están generando reseñas engañosas fuera de nuestra tienda”, añade.
Asimismo, el gigante de la venta online asegura que alienta a los clientes preocupados por la autenticidad de las reseñas que pueda ver en un producto a que utilicen la función «Informar de un abuso», disponible en cada una de estas reseñas, “para que podamos investigar y tomar las medidas adecuadas. Somos incansables en nuestros esfuerzos por proteger la integridad de las opiniones de los clientes, y continuaremos innovando para asegurarnos de que los clientes puedan confiar en que cada opinión en Amazon es auténtica y relevante”, concluye.