Uno de cada 10 bebés nace de forma prematura en el mundo; lo que supone que cerca de 15 millones de nacimientos al año son pretérmino. En España, cerca de 27.000 son prematuros y de estos, más de 3.500 bebés nacen con menos de 32 semanas o con muy bajo peso. Nestlé, como empresa de investigación nutricional para prematuros, lleva una década al lado de estos Bebés, de sus familias y de los equipos médicos de neonatología. Así pues, la compañía colabora con entidades a nivel nacional como APREM (Asociación de Padres de Niños Prematuros) o Som Prematurs.
Precisamente con estos últimos, Som Prematurs, la compañía participa en la entrega de neveras portátiles a madres y padres para que puedan transportar la leche materna extraída de casa al hospital. Estas neveras se entregarán a todas las familias de prematuros de casi una docena de hospitales.
Además de la investigación propia en alimentación, la compañía colabora con hospitales de referencia como el Hospital Gregorio Marañón (Madrid) con quien están realizando un estudio clínico único en Europa con el objetivo de mejorar el tratamiento nutricional que reciben los bebés prematuros y garantizar así su correcto desarrollo y crecimiento.
Hasta el momento, la nutrición que se ofrecía a estos bebés era estándar. Sin embargo, los expertos han detectado que, depende del grado de prematuridad, el aporte de proteínas generalizado puede ser insuficiente. Por este motivo, la leche materna o de banco, necesita ser fortificada, es decir, enriquecida con macro y micronutrientes. En estos momentos, más de 50 pequeños participan en este estudio y ya están recibiendo un tratamiento nutricional personalizado en función de la semana de gestación en la que han nacido y del momento de la lactancia en el que se encuentran.