La mejora de la biodiversidad, la conservación del suelo, la regeneración de los ciclos del agua y la integración de la ganadería son algunos de los objetivos que se ha propuesto Nestlé dentro de su plan para alcanzar un sistema alimentario regenerativo, en el que invertirá 1.104 millones de euros en los próximos cinco años.
La agricultura representa casi dos tercios de las emisiones totales de gases de efecto invernadero de Nestlé y los productos lácteos y el ganado representan aproximadamente la mitad. Para restaurar el medio ambiente y mejorar tanto los medios de vida de los agricultores como el bienestar de las comunidades agrícolas, Nestlé trabajará con sus partners, incluida la red de más de 500.000 agricultores y 150.000 proveedores con los que colabora. Tratarán de promover las prácticas agrícolas regenerativas en el corazón del sistema alimentario. La compañía también iniciará nuevos programas para ayudar a abordar los desafíos sociales y económicos de dicha transición.
El anuncio se realiza previo a la Cumbre de sistemas alimentarios de las Naciones Unidas en Nueva York, como parte de la contribución de Nestlé para ayudar a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2030. También sigue el informe reciente del Panel Intergubernamental de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático que muestra que la crisis climática se está intensificando.
“Sabemos que la agricultura regenerativa juega un papel fundamental en la mejora de la salud del suelo, la restauración de los ciclos del agua y el aumento de la biodiversidad a largo plazo”, ha afirmado el presidente de Nestlé, Paul Bulcke. «Estos forman la base de la producción sostenible de alimentos y, de manera crucial, también contribuyen a lograr nuestros ambiciosos objetivos climáticos», ha señalado.
La compañía está tomando medidas para reducir a la mitad sus emisiones para 2030 y lograr cero emisiones netas para 2050. “Con nuestras colaboraciones a largo plazo con comunidades agrícolas a nivel mundial, queremos aumentar nuestro apoyo a las prácticas en la agricultura que son buenas para el medio ambiente y para las personas”, ha explicado Mark Schneider, CEO de Nestlé. “Con el espíritu de permitir una transición justa, es vital que apoyemos a los agricultores de todo el mundo que asumen los riesgos y costos asociados con el avance hacia la agricultura regenerativa”, ha destacado.
Utilizarán tres palancas principales para ayudar a los agricultores a adoptar prácticas regenerativas: aplicar ciencia y tecnología de vanguardia y proporcionar asistencia técnica: aprovechando su amplia red de expertos en I+D y agrónomos, Nestlé está, por ejemplo, desarrollando variedades de café y cacao de mayor rendimiento con menor impacto ambiental y evaluando soluciones novedosas para reducir las emisiones en la cadena de suministro de lácteos. Nestlé también ofrecerá formación agrícola y ayudará a los agricultores a intercambiar información y mejores prácticas que se pueden adaptar localmente.
También se propone ofrecer apoyo a la inversión para la transición a la agricultura regenerativa, ya que esta conlleva riesgos iniciales y nuevos costes o pagar primas por productos agrícolas regenerativos y recompensar a los agricultores no solo por la cantidad y calidad de los ingredientes, sino también por los beneficios que brindan al medio ambiente a través de la protección del suelo, la gestión del agua y el secuestro de carbono. En los productos lácteos, por ejemplo, Nestlé está evaluando ciencia de vanguardia y tecnología para reducir las emisiones a nivel de las granjas.
La compañía comenzará a trabajar con 30 granjas lecheras de referencia en 12 países para probar prácticas agrícolas escalables, respetuosas con el clima y regenerativas que ayuden a lograr cero emisiones netas de gases de efecto invernadero. Nestlé también está trabajando con los agricultores para seleccionar y cultivar variedades de legumbres nutritivas y sabrosas que se utilizarán como alternativas a la leche.