En tiempos de incertidumbre económica cambian los hábitos de los consumidores y para los marcas de distribución es vital saber gestionarlos adecuadamente para seguir vendiendo, según la primera entrega del estudio “Inflación un cambio de paradigma”, elaborado por Quantum Metric,
Y es que, cerca del 53% de los españoles ha visto reducida su renta disponible en un 25% como consecuencia de la inflación, siendo los grupos de edad más afectados los adultos de entre 45 y 54 años, así como los más jóvenes, los que tienen entre 18 y 24 años y, casi en la misma línea, los que tienen entre 25 y 34 años.
El estudio confirma cómo con la bajada de poder adquisitivo de los españoles se ha reducido también el número de ocasiones de compra realizadas por los consumidores. La información que estos aportan es por tanto menor y mayor el riesgo que afrontan las marcas al ofrecer su producto.
Así, el 51% de los consumidores españoles opta por una buena planificación y compra todo de una vez. En este sentido, los adultos de entre 45 y 54 años son quienes más optan por la planificación a la hora de realizar sus compras ya que un 57,3% confirma esta tendencia. Sin embargo, en rangos de edad inferiores el dato disminuye. De los jóvenes de entre 25 y 34 años el 46% afirma que incrementa la planificación, mientras que en aquellos que tienen entre 18 y 24 años el porcentaje es algo superior, situándose en un 49,7%.
En cuanto al volumen de compra, el 29% reduce la cesta de la compra y alarga la vida de los artículos y alimentos. En este caso, son también los grupos de edad adulta quienes más siguen este hábito de compra. Un 34,51% de los que se sitúan entre 45 y 54 años afirma estar reduciendo la cesta para alargar la vida de los productos. De los jóvenes de entre 25 y 34 años, el 26,75% afirma seguir este hábito, mientras que el porcentaje se ve reducido ligeramente hasta el 25,48% para aquellos que tienen entre 18 y 24 años.
“La reducción en la frecuencia de compra hace más valiosa incluso la experiencia de cliente, ya que el vendedor no puede permitirse tener ni una experiencia negativa”, destaca el informe, en el que se ha encuestado a un panel de 1.700 consumidores mayores de 18 años en España para conocer, entre otras cuestiones, la forma en la que la inflación ha afectado a los hábitos de consumo de los españoles.
Apuesta por las marcas blancas
Con el aumento de los precios, las marcas pueden empezar a perder su atractivo, especialmente si los clientes perciben que una versión genérica del mismo artículo es igual de válida. Esto está pasando sobre todo en España: dos de cada tres españoles eligen marcas genéricas o del propio establecimiento a la hora de comprar ropa (un 66 %) o artículos del sector de salud y bienestar (60 %) con el fin de recortar gastos.
“El sector retail debe centrarse en ofrecer el máximo valor posible para captar clientes. Con la subida de los precios de estos últimos tres meses, también han aumentado las expectativas de los consumidores españoles, y quienes buscan el ahorro no se conforman solo con que el precio sea más bajo; de hecho, solo el 34 % elige la tienda en la que va a comprar por sus precios. Lo que importa al resto es lo que obtiene por su dinero, ya sea un producto (25 %) o una experiencia (41 %) de alta calidad”, señala el informe.