Las previsiones de la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) señalan que la producción mundial de vino en 2022 ascenderá a cerca de 259,9 millones de hectolitros, lo que supone una reducción del 1% respecto a 2021.
Esta cifra se debe a un volumen de cosecha superior al esperado en Europa (a pesar de la sequía y las olas de calor durante la primavera y el verano) y nivel de producción promedio registrado en el Hemisferio Sur y en los EEUU. En general, en 2022, las condiciones secas y calurosas observadas en diferentes regiones del mundo han llevado a cosechas tempranas y volúmenes promedio, sin embargo, se espera una buena calidad general, destaca la OIV.
“Cabe señalar, sin embargo, que las cifras para 2022 deben tomarse con cautela, ya que todavía hay países grandes como China y Rusia para los que aún no se dispone de información. Asimismo, la alta volatilidad en los volúmenes de producción observada en los últimos años a nivel regional dificulta aún más el ejercicio de pronóstico”, añade.
En concreto, en la Unión Europea (UE) como conjunto, se estima que la producción aumentará un 2% hasta alcanzar los 159,6 millones de hectolitros. Así, después de un 2021 catastrófico, en especial por las heladas, Francia tendrá un crecimiento del 17% hasta los 44,2 millones de hectolitros y se consolidará como el «número dos» mundial solo por detrás de Italia, que se mantendrá prácticamente estable con 50,3 millones.
Por su parte, España, el tercer gran productor mundial, se quedará en 33 millones de hectolitros, un 6% menos que en 2021 y un 12% por debajo de la media de los cinco últimos años. Portugal verá reducida su producción un 8% si se compara con 2021, con 6,7 millones y en Grecia caerá un 29% hasta los 1,7 millones.
En Estados Unidos, cuarto país en importancia por la producción, el volumen de vino caerá un 4% respecto a 2021 hasta 23,1 millones de hectolitros, que supondrán un 6% menos que la media de los últimos cinco años.
En el hemisferio sur, donde las cosechas terminan en el primer trimestre de 2022, las cifras preliminares de producción de vino tienden a ser más precisas en este período del año. Después de una disminución significativa en la producción de vino en 2020 causada por condiciones climáticas desfavorables y una cosecha récord en 2021, en 2022 la estimación de producción de vino para el hemisferio sur es de aproximadamente 55 millones de hectolitros, un 7% por debajo en comparación con el año anterior, pero totalmente en línea con su último promedio de cinco años. En general, en 2022 se espera que la producción de vino del hemisferio sur represente el 21% del total mundial.
Los dos grandes países vinícolas de esta zona experimentarán fuertes descensos. En Chile, la caída será del 7%, aunque con 12,4 millones de hectolitros sigue estando por encima de la media de los cinco últimos años. En Argentina el descenso del 9% que se anticipa para este año da un volumen de 11,4 millones, netamente inferior a los 12,5 millones de la media de los cinco años precedentes.
En Sudáfrica, la producción de vino en 2022 se estima en 10,4 millones de hectolitros, lo que supone un descenso del 4% con respecto a 2021. Sin embargo, cabe señalar que esta cifra está perfectamente en línea con su media de cinco años. Australia, por su parte, registró la mayor variación negativa con respecto al año pasado de todo el Hemisferio Sur. Con 12,1 millones de hectolitros, registra un 18% de descenso en comparación con 2021.
Nueva Zelanda representa, una vez más, la excepción en el hemisferio sur. Mientras que en 2021 Nueva Zelanda fue el único país importante del hemisferio sur que tuvo una cosecha de uva para vino inferior a la media, en 2022 registró un nivel récord de producción de vino, alcanzando por primera vez en su historia 3,8 millones de hectolitros (+44 %/2021).