Congalsa presentó a finales de 2019 su proyecto Congals4.0 cuyo objetivo era avanzar hacia lo que se ha llamada fábrica inteligente. Ahora, tres años y medio después esta iniciativa es ya una realidad y la compañía ha logrado convertirse en un negocio 4.0 que está reportando importantes beneficios.
Este proyecto, que se enmarca dentro del Programa Industrias del Futuro 4.0., impulsado desde la Agencia Gallega de Innovación-GAIN y en colaboración con el Centro Tecnológico Gradiant, promueve un modelo industrial interconectado entre los diferentes eslabones de la fábrica. De este modo, el objetivo principal de la iniciativa ha sido el de desarrollar un modelo de negocio 4.0. para Congalsa, interconectando procesos productivos y de gestión.
Para lograrlo, se ha sensorizado gran parte de la planta y se han desarrollado sistemas para monitorizar en tiempo real diferentes datos de procesos de la compañía, integrando esta información con otros procedentes de proveedores y clientes con el objetivo de digitalizar la cadena de valor de la empresa y automatizar diferentes rutinas de trabajo: desde la gestión de mantenimiento, hasta la planificación de las fabricaciones.
Tal y como ha explicado Luis Miguel Simarro, director general de la compañía, “nuestro objetivo era ir hacia un modelo fabril más flexible e innovador, lo que se ha llamado fábrica inteligente, que nos permitiera anticiparnos a la demanda del mercado” y ha recordado que se presentó como “un proyecto con tecnología industrial más innovadora para comercializar productos congelados y refrigerados”.
Simarro ha destacado que “en Congalsa apostamos por la sostenibilidad económica, ambiental y social”, algo que se ha logrado con este proyecto del que ha destacado que “todas las innovaciones tecnológicas no tienen como finalidad sustituir a las personas”. De hecho, la plantilla de la compañía ha crecido en estos tres años y todos los trabajadores han recibido la formación necesaria para seguir acometiendo su labor. Asimismo, la facturación de la compañía ha pasado de 100 millones a 132 millones.
“Apostamos por la automatización pero la calidad y las personas van a seguir estando en el centro de la empresa”, ha señalado el director general de la compañía, que ha señalado que la implementación de sistemas inteligentes de visión de diferentes productos ayudará, por ejemplo, a los operarios a realizar más eficazmente su labor. Junto a esto, las tecnologías de realidad aumentada implantadas están ya siendo especialmente útiles en formaciones orientadas al personal y la incorporación de la impresión 3D ya es una herramienta más de trabajo diario en la empresa, muy útil para que los técnicos desarrollen su trabajo con mayor precisión, con reducción de coste y mejoras de tiempo de desarrollo.
“En Congalsa ya practicábamos la innovación cuando aún no se llamaba I+D+i” y ahora nos hemos convertido en “un referente de modelo de fábrica inteligentes dentro de la industria agroalimentaria gallega”, ha añadido Simarro.
“Congals4.0 nos ha permitido perfeccionar nuestras metodologías de análisis de datos para estimar y predecir comportamientos de precios de materias primas, de ventas de producto y de procesos”, ha detallado Daniel García, director de Sistemas Inteligentes de Gradiant. “Además, hemos incorporado otras tecnologías que ayudarán a la empresa en la prevención de potenciales ciberataques, optimizando la seguridad y privacidad de la planta” ha añadido.
Un proyecto vivo
Por su parte, la directora de Innovación e I+D de Congalsa, Mónica Cascallar, ha destacado que la iniciativa ha movilizado directamente para su implementación a más de 60 personas, sólo entre Congalsa y Gradiant. «Podemos decir, en todo caso, que en el desarrollo del proyecto ha participado prácticamente toda nuestra plantilla, de forma más o menos activa o puntual, así como varios partners tecnológicos, sin los cuales el cumplimiento de los objetivos fijado no hubiera sido posible”, ha añadido.
La directora Innovación e I+D de Congalsa ha explicado los bloques en los que se ha trabajado para llevar a cabo este proyecto y ha recordado cómo la pandemia o la guerra de Ucrania han afectado los tiempos y objetivos originales. No obstante, “empezamos con ilusión y terminamos con más ilusión”, ha destacado.
“El objetivo era hacer una fábrica automatizada e inteligente y creemos que los hemos conseguido” y que, además, “lo hemos hecho en tiempo récord”, ha asegurado Cascallas, que ha destacado que “se han superado los cinco millones de euros de presupuesto que teníamos al principio”.
Finalmente, Mónica Cascallar ha señalado que Congals4.0 es un proyecto que sigue vivo. “Estamos ya trabajando con prácticamente todas las herramientas desarrolladas en el marco de la iniciativa, pensando en cómo industrializar algunos de los pilotos validados para seguir creciendo de forma sostenible, generando nuevo conocimiento y aprovechando en la industria las tecnologías accesibles y emergentes”, ha concluido.
Felicitaciones Congalsa por hacerse presente en el siglo 21. Todo un reto cumplido en beneficio de la sociedad.