La Confederación Española de Pesca (CEPESCA), que representa al sector pesquero, confía en que la actual situación política y el período de incertidumbre que se espera hasta la formación de un nuevo Gobierno no afecten negativamente a la defensa de los intereses de la flota española en Europa. Esto se debe a la importancia de las propuestas de la Comisión Europea (CE) que afectan al sector. Además, los pescadores solicitan que esta coyuntura no debilite la agenda de temas y demandas del sector ante el Gobierno español.
El sector recuerda que Europa se enfrenta a la posible revisión de la Política Pesquera Común (PPC), la evaluación de la política de la Unión Europea para gestionar el mercado común de productos pesqueros y la propuesta de la CE a través del «Plan de Acción de la UE: proteger y restaurar los ecosistemas marinos en pro de una pesca sostenible y resiliente», que busca aumentar las Áreas Marinas Protegidas (AMP) del 12% al 30% para 2030 y prohibir el arrastre en estas áreas.
Según el sector, esta última propuesta tendría graves consecuencias para la flota española, especialmente después del cierre de 87 zonas de pesca de fondo en el Atlántico Nordeste, desde Irlanda hasta el Golfo de Cádiz, tras la aprobación del Reglamento de Ejecución (UE) 2022/1614 de la CE, y su anunciada revisión antes de fin de año. El Comité Científico, Técnico y Económico de la Pesca de la UE estima que estas vedas podrían ocasionar pérdidas anuales de hasta 16,6 millones de euros para la flota española.
Además, Europa está abordando el proceso de descarbonización de la flota, con el objetivo de lograr cero emisiones para 2050. Esto requerirá nuevas fuentes de financiación y fórmulas aceleradas, teniendo en cuenta la escasez de energía verde o neutra, la antigüedad promedio de la flota y las contradicciones en la PPC que limitan la adaptación a nuevos motores.
Otros temas importantes en la agenda del sector incluyen la no renovación del acuerdo de pesca entre la UE y Marruecos, las cuotas de pesca para el próximo año en aguas de la UE, los días de pesca en el Mediterráneo y las medidas de gestión en organizaciones regionales de pesca como ICCAT o NAFO.
Javier Garat, secretario general de Cepesca, señaló que «los tiempos de incertidumbre política no benefician a nadie y son especialmente perjudiciales para cualquier actividad económica, especialmente para la nuestra, que está muy regulada y es sensible a los puntos de vista políticos, a menudo poco informados sobre la realidad. Confiamos en que la situación política española no afecte la defensa de los intereses de nuestra flota, que también son los intereses de los españoles, dada la importancia de los temas en la mesa en Europa».
El sector también busca no debilitar su agenda y demandas ante el Gobierno español en medio de la incertidumbre y los impactos económicos de eventos como el conflicto de Ucrania y la ralentización económica. Mantienen su solicitud de reducir o eliminar el IVA de los productos pesqueros para promover alimentos saludables. Además, buscan la creación de un Ministerio del Mar o una Secretaría de Estado de Pesca, así como beneficios fiscales y sociales para las empresas pesqueras y una defensa firme de los intereses pesqueros ante la UE.
En definitiva, el sector busca equilibrar los aspectos sociales, económicos y medioambientales en la Política Pesquera Común para garantizar un futuro sostenible y resiliente para la pesca española y europea.