El agua mineral natural mantiene su posición de preferencia en la cesta de la compra de los consumidores a nivel mundial. De hecho, el mercado de agua envasada ha experimentado un crecimiento del 5,3%, durante el periodo de 2013-2018, mismo comportamiento que en España, donde el consumo de agua mineral también se ha elevado, con una tasa de crecimiento anual cercana al 4% en el mismo periodo.
Así lo revela un estudio realizado por la European Federation of Bottled Waters (EFBW) recogido por la consultora Global Data, que también señala que el agua envasada es la bebida no alcohólica más consumida, con un 48% del total; seguida de los refrescos, con un 39%; zumos y néctares, con un 7% y las bebidas solubles con un 6%.
En la encuesta, realizada a consumidores europeos, en la que también se han analizado tendencias de consumo, se puede extraer que la población está cada vez más comprometida con el cuidado de su alimentación, y se observa una clara tendencia hacia el consumo de productos naturales y de calidad, que les ayuden a mantener un estilo de vida sano. En concreto, el 57% de los consumidores afirman que en su decisión de compra influye que el producto tenga un claro impacto positivo en su salud y bienestar.
Por otra parte, también cabe destacar que el 44% de los consumidores valoran en su decisión de compra, los productos respetuosos con el medioambiente y que sean socialmente responsables.
Para Irene Zafra, secretaria general de la Asociación de Aguas Minerales de España (Aneabe), estos datos muestran varios aspectos muy positivos y refuerzan el compromiso adquirido por las empresas envasadoras de poner a disposición de los consumidores un producto sano, saludable y sostenible desde su origen.
Asimismo, explica que, “el agua mineral es un producto 100% natural, que llega al consumidor con las mismas características y propiedades que las que tiene en la naturaleza, que no necesita ni recibe ningún tratamiento químico para su consumo y que, además, se puede conocer su composición mineral con tan solo consultar el etiquetado impreso en cada botella”.