El Índice de Precios de Consumo (IPC) se mantuvo en agosto en relación al mes anterior y recortó cinco décimas su tasa interanual hasta situarse en el 2,3%, según los datos definitivos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que recoge que los precios de los alimentos se situaron en el 2,5%, lo que supone cinco décimas por debajo de la tasa del mes pasado.
Este comportamiento en el precio de los alimentos fue debido, principalmente, a la bajada de los precios de los aceites y grasas y de las legumbres y hortalizas, frente a la subida en agosto del año anterior. Otro grupo que destacan por su influencia en el descenso es transporte, que situó situó su variación anual en el -1,3%, lo que supuso 3,7 puntos por debajo de la del mes pasado.
Por su parte, la tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) bajó una décima respecto julio, y se situó en el 2,7%.
El IPC registró tasas anuales positivas en todas las comunidades autónomas en agosto. País Vasco presentó la más elevada (2,6%) y Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Región de Murcia las más bajas (2,0% las cuatro).
En tasa mensual, los grupos con mayor repercusión mensual positiva fueron: ocio y cultura, que presentó una variación del 1,4%, debida a la subida de los precios de los paquetes turísticos; y vivienda, con una tasa del 0,7% a causa del aumento de los precios de la electricidad. Por su parte, entre los grupos con repercusión mensual negativa destacan alimentación y bebidas no alcohólicas, cuya tasa del -0,4% fue consecuencia del descenso en los precios de las frutas.