Los sindicatos miembros de la comisión sindical de El Corte Inglés (Fasga, CCOO, Fetico y UGT), recibieron el pasado sábado la comunicación del inicio de un proceso de reorganización de la empresa y por tanto de su plantilla. En concreto, se pretende llevar cabo un plan voluntario de bajas para un máximo de 3.000 empleados, tal y como adelantó ya el viernes a algunos medios el gigante de la distribución español.
Así, esta semana se constituirá en acto formal la comisión negociadora tal y como indica el Estatuto de los Trabajadores, y posteriormente esta comisión iniciará las negociaciones con la empresa para acompasar las medidas, haciéndolas lo más atractivas posibles a la plantilla, explica el comunicado remitido a los sindicatos, que señala que “el proceso se realizará con el máximo dialogo, idéntico al mantenido hasta ahora con esta comisión sindical, y que se van a buscar medidas positivas como: la voluntariedad y buenas condiciones económicas para la plantilla”.
El Corte Inglés ha indicado que su plan de reorganización “futuro”, debe buscar la viabilidad de la empresa, su posicionamiento en un mercado cambiante, la reordenación del mundo del retail y su nueva dimensión tras el impacto de la venta online. Asimismo, los sindicatos señalan que este momento de reorganización y ajuste de la plantilla viene tras el cierre de Linares y la reorganización de Guadalajara, así como de las noticias de más centros afectados por cierre, que ha provocado una avalancha de inquietud en la plantilla.
“Nuestra posición frente a la empresa va a ser clara y contundente buscando unas condiciones de salida de plantilla por encima de límites legales y con posibilidades de adscripción voluntaria desde cualquier punto de España, de tal forma que ese ajuste de plantilla no se realice de forma traumática sino armonizada con los intereses de las personas”, han asegurado.