El 90% de los ingresos generados a través de los pagos de los usuarios en los comercios es susceptible de pasar a manos de proveedores de software independientes o grandes empresas tecnológicas durante la próxima década. De hecho, la mitad de los usuarios de Apple Card de entre 25 y 34 años afirman que esta es su principal tarjeta de crédito, según un nuevo informe de Bain & Company.
Respecto a los proveedores de software independientes, el estudio aclara que sus ingresos derivados de pagos tendrán un crecimiento mucho más pronunciado en Estados Unidos que en la Unión Europea. Francisco Montenegro, socio de Bain & Company, afirma que “aunque se espera que los cambios estructurales en el panorama de los pagos tarden más en producirse en la UE que en EEUU (en particular, España y Portugal, economías en las que se utilizan mucho las tarjetas y en las que los mercados de intercambio son reducidos), las empresas tradicionales tienen que abordar de forma proactiva estas nuevas tendencias. No pueden confiar en la ola de crecimiento general de los pagos. Deben aprovechar esta oportunidad para determinar dónde y cómo superar a la competencia, qué características deben mejorar para seguir siendo relevantes y estar preparadas para cuando los competidores les alcancen”.
Por otro lado, la consultora destaca que los métodos de pago alternativos –como los pagos instantáneos– crecen cada vez más. El progresivo abandono del efectivo contribuirá a que las tarjetas sigan siendo el producto que más ingresos genera en el sector, pero el auge de los pagos instantáneos –cuyo crecimiento anual estimado es del 8%– limitará su crecimiento a largo plazo.
Para hacer frente a estos retos, la industria de medios de pago deberá replantear sus estrategias, alianzas y herramientas tecnológicas, además de ampliar sus servicios más allá del procesamiento de transacciones. En este sentido Bain & Company identifica cuatro áreas de actuación:
- Estrategia con perspectiva de futuro. Aunque podría parecer difícil saber qué métodos de pago preferirán los consumidores en el futuro, un enfoque de la estrategia que defina hacia dónde se quiere llegar puede ayudar a identificar y aprovechar nuevas oportunidades. Por otro lado, como los pagos al por menor requieren de un gran alcance, las empresas tendrán que reforzar su posición mediante adquisiciones y alianzas.
- Ventas y marketing muy específicos. Los medios de pago siempre se han centrado en la personalización y la segmentación de clientes, pero un análisis basado en datos permitirá que las empresas se puedan orientar hacia las oportunidades del mercado que concentran un mayor capital.
- Transformación tecnológica. Las infraestructuras tradicionales tendrán que sustituirse por sistemas más flexibles para dar paso a los pagos instantáneos, la web 3.0 y otras tecnologías de pago vanguardistas. También deberán apostar por el desarrollo de aplicaciones con una arquitectura de software moderna.
- Reducciones selectivas de costes. La mayoría de las empresas se verán obligadas a contar con unos márgenes de beneficio cada vez menores, por lo que tendrán que reducir drásticamente sus costes operativos. Esto puede pasar por invertir en la automatización de áreas como operaciones, atención al cliente y compliance.