La crisis está afectando la rutina diaria y semanal de los compradores a nivel mundial. Así, el 58% de los clientes en todo el mundo continúa disminuyendo la frecuencia de visita a las tiendas de alimentación debido a la preocupación de estar cerca de otros, según el análisis de la firma consultora Oliver Wyman, que destaca que esto representa un verdadero desafío para los minoristas de alimentos.
«El problema a menudo no es la oferta sino la demanda, que actualmente es mucho más difícil de predecir«, explica Nordal Cavadini, socio de Oliver Wyman Retail & Consumer Goods.
Además, los consumidores generalmente son menos leales a sus tiendas de alimentación habituales, cambian temporalmente y un 7% lo hace «para siempre» debido a la proximidad, las horas de operación y la capacidad de realizar pedidos online.
Otros desafíos que preocupan a los minoristas son que el 69% de todos los encuestados declararon que no podían encontrar el producto deseado en la tienda mientras que el 29% dijo que se sentía incómodo debido a las largas colas y el 24% sintió la falta de comodidad de estar dentro de una tienda física. «En base a nuestro análisis de escucha social, aquellos que dominan estos desafíos son claramente reconocidos y aumentan dramáticamente su percepción por parte de los consumidores», dijo Cavadini.
Y es que, según este estudio, cada vez un mayor número de clientes están más ansiosos que nunca por las compras de alimentos debido al Covid-19. A ello se une que más de un tercio de los consumidores ha visto disminuir los ingresos de sus hogares con Italia (47%) y España (58%) a la cabeza.
No obstante, mientras el gasto total de los hogares está disminuyendo, el gasto en alimentos continúa aumentando. El 37% de los encuestados de EEUU, frente al 29% dos semanas antes, y el 31% de los encuestados del Reino Unido, frente al 18% anterior, dijeron que están gastando más en este tipo de productos. “Esto podría indicar que algunos países están en la cima de la crisis y avanzan hacia un pico de gasto inicial”, destaca el estudio.
Compra online
Los consumidores también están considerando activamente formas de no ir al supermercado físico y hacer pedidos online, según el análisis de redes sociales de la consultora, que aconseja a los minoristas con una presencia online que deberán continuar invirtiendo en esta área para satisfacer la mayor demanda en línea. De hecho, el 13% de los encuestados se han cambiado a comprar alimentos a través de Internet, al menos temporalmente, mientras que el 26% ya compraba a través de este canal antes de la crisis.
«Asumimos que cada vez más clientes harán sus compras de alimentos online y que esa fase acelerará de manera sostenible el crecimiento de los alimentos electrónicos«, dijo Cavadini. Sin embargo, esto solo podrá llevarse a cabo si la industria encuentra una solución a los problemas a los que se está encontrando. Y es que la falta de espacios de entrega es criticada por el 57% de los encuestados que compraron online. Además, el 63% se quejó de la falta de disponibilidad de algunos productos.
Reducción de la compra de alimentos a corto plazo
En su análisis, Oliver Wyman ya advierte que si bien actualmente se están produciendo aumentos en el gasto en alimentos en muchos países, este patrón está comenzando a cambiar en Italia y España, donde el confinamiento lleva más tiempo y los ingresos han sido más afectados, con el 47% y el 58% de los encuestados que dicen que sus ingresos familiares han disminuido, en comparación con un promedio del 40%.
Así, un gran número de encuestados dice que está comprando más productos con descuento en España e Italia.
“Esperamos que esta tendencia continúe en otros países, ya que las consecuencias económicas de la crisis comienzan a afectar los ingresos de los hogares e impacta en el gasto discrecional que ya hemos visto en muchas categorías generales de comercialización, como indumentaria y productos de belleza”, señala el estudio, que predice que “eventualmente, esto incluirá el gasto en alimentos en el futuro”.