Deoleo ha cerrado 2021 con una cifra de ventas de 61 millones de euros, logrando resultados positivos por segundo año consecutivo. Así, ha finalizado el ejercicio con un ebitda de 48 millones y cumpliendo los objetivos previstos en un contexto de mercado complicado, marcado por la reducción del consumo de aceite de oliva en el hogar debido a la normalización de la situación sanitaria.
El grupo también se ha enfrentado durante los últimos meses a un significativo incremento del precio de la materia prima, que ha aumentado un promedio del 48%, así como los costes logísticos y de otros materiales. Esto, sumado a la reducción de consumo de aceite derivada de la mejora de la situación pandémica, han provocado una reducción del 6% en sus volúmenes de ventas, también en línea con las previsiones.
Sin embargo, la evolución por lo general positiva de 2021 ha permitido a Deoleo reducir su deuda neta en un 20%, hasta los 120 millones al cierre del ejercicio, tras amortizar de forma voluntaria 25 millones del crédito sindicado en el cuarto trimestre de 2021.
Asimismo, gracias a la posición de tesorería alcanzada al cierre del ejercicio, que se situó en 86 millones, la compañía amortizó otros 18 millones en enero de 2022, dejando el importe de la deuda sindicada pendiente de amortizar en 160 millones de euros.
A pesar de ello, la compañía logró traspasar parte de la mencionada subida de precios en origen. Esto ha permitido compensar parcialmente el impacto de la subida de los costes y llevar a cabo las acciones comerciales adecuadas para sostener la caída de los volúmenes. De esta forma, la cifra de ventas ha subido un 6% con respecto al ejercicio anterior, compensando en parte el impacto del incremento de los costes en los márgenes del grupo.
En palabras de Ignacio Silva, presidente y consejero delegado de Deoleo, “la compañía ha cumplido con los objetivos previstos a inicio de ejercicio, a pesar de que el incremento de costes, de cerca de un 50%, no estaba contemplado en ese momento, lo que da muestra de la fortaleza, flexibilidad y buena evolución del negocio. Este factor, sumado a la gestión del capital circulante y a la generación de caja, nos ha permitido amortizar de forma significativa nuestra deuda, reforzando así la solidez financiera de la compañía”.
En el ejercicio 2021, Deoleo ha puesto en valor la solidez financiera alcanzada tras la restructuración culminada en junio de 2020. Gracias a la buena evolución del negocio y a la gestión del capital circulante, el grupo generó 33 millones de caja y amortizó una parte significativa de la deuda sindicada que, a 30 de junio de 2020, momento en el que se concluyó el proceso de refinanciación, ascendía a 242 millones y, que en el momento de emisión de los resultados del ejercicio 2021, asciende a 160 millones.