El grupo alimentación Danone ha registrado una facturación de 23.620 millones de euros en 2020, lo que supone un 6,6% menos que en el conjunto del 2019. No obstante, en términos comparables el recorte ha sido de un 1,5%, según ha informado en un comunicado.
Asimismo, ha cerrado el ejercicio con un beneficio neto atribuido de 1.956 millones de euros, lo que supone un aumento del 1,4% respecto el año anterior, aunque si se descuenta el impacto de atípicos, el beneficio neto recurrente de la compañía francesa asciende a 2.189 millones de euros, un 13% por debajo del contabilizado en 2019.
Por líneas de negocio, la facturación del segmento de productos lácteos disminuyó un 2,6%, hasta los 12.823 millones, mientras que las ventas de la división de nutrición especial cayeron un 4,8% hasta los 7.192 millones, y las del negocio de aguas un 21%, hasta los 3.605 millones.
En cuanto al cuarto trimestre del año, las ventas de Danone ascendieron 5.628 millones, lo que supone un 9,8% menos que en el mismo periodo del 2019. En términos comparables el descenso fue del 1,4%.
En palabras del presidente y consejero delegado del grupo, Emmanuel Faber, “a medida que el Covid-19 se convirtió en una pandemia a lo largo de 2020, enfrentamos desafíos materiales específicos a corto plazo en varias de nuestras categorías y geografías clave, pero también descubrimos oportunidades significativas a largo plazo, cuya existencia radica directamente en el marco estratégico y la elección de la cartera de categorías que hicimos durante los últimos años”.
“2021 será un año de recuperación, estamos enfocados en preparar nuestro retorno al crecimiento de las ventas tan pronto como llegue el segundo trimestre, y estamos completamente seguros de que estamos creando las condiciones y el impulso adecuados para reconectarnos con nuestra agenda de crecimiento rentable”, ha añadido.