El grupo francés de alimentación Danone ha informado este lunes que va a llevar a cabo un plan de reorganización con el que pretende alcanzar un ahorro de costes de 1.000 millones de euros para 2023, incluida una reducción del 20% en los gastos generales.
Este plan incluye un ajuste de plantilla que afectará a entre 1.500 y 2.000 trabajadores, alrededor del 2% del total, incluyendo hasta un 25% de los puestos de trabajo actuales de su sede global, además de la relocalización de las sedes globales de varios negocios más cerca de la sede de París.
Asimismo, la compañía prevé para dar mayor relevancia a lo local en respuesta a los cambios observados en los hábitos de consumo como consecuencia del Covid-19, denominado ‘Local First’, según el cual las unidades locales de la multinacional recuperarán autonomía al no seguir dependiendo de una organización de categoría global específica, sino que pasarán a estar unificadas en una sola unidad comercial local.
La multinacional calcula que incurrirá en costes extraordinarios de unos 1.400 millones de euros durante el periodo comprendido entre 2021 y 2023 por la implementación de estas medidas.
Según ha explicado Emmanuel Faber, presidente y consejero delegado de Danone, “la pandemia mundial ha acelerado una serie de patrones de la revolución alimentaria y ha alterado otros”, quien recuerda que “en julio pasado, anunciamos que nos daríamos hasta fin de año para trabajar en nuestro plan de adaptación” y destaca que “definitivamente necesitamos reinventarnos, como empresa, al igual que todos lo hacemos en nuestra propia forma de vivir, trabajar o consumir. En esta reinvención de la alimentación, el paradigma más destacado acelerado por la pandemia es sin duda la tendencia hacia lo local”.
Por otro lado, la multinacional francesa ha confirmado sus previsiones para el conjunto del ejercicio 2020, cuando espera alcanzar un margen operativo recurrente del 14% y lograr un flujo de caja libre de 1.800 millones de euros. Asimismo, confía en volver a un crecimiento rentable en menos de 12 meses, a partir del segundo semestre de 2021 y que el margen operativo recurrente regrese a sus niveles pre-covid en más del 15% para 2022.
“El crecimiento es condición sine qua non de nuestro éxito, de nuestro impacto positivo. Pero en estas nuevas circunstancias, quiero insistir en la máxima importancia de la rentabilidad de nuestro modelo, porque este año ha demostrado que la competitividad de nuestros negocios, de nuestras marcas, en nuestros países, podría verse desestabilizada por factores externos fuertes y brutales”, ha señalado Faber al respecto.