Según la última encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el uso de las tecnologías en los hogares españoles, casi 20 millones de personas ha adquirido productos y servicios online en los últimos tres meses (7,2 puntos por encima que en 2020). De ahí que el Ministerio de Consumo haya lanzado una campaña para recordar sus derechos a los compradores online.
El ministerio hace esta advertencia tras estimarse un fuerte aumento de las compras online debido a las nuevas medidas relativas a aforos y establecimientos interiores como consecuencia de la pandemia.
Ante ello, Consumo advierte de que tanto las políticas de pago, como las de devolución y garantías, deben mantenerse tanto en los canales físicos como en los canales online durante este periodo de rebajas en las mismas condiciones que el resto del año.
Esto significa que los establecimientos físicos y digitales, entre otras obligaciones, tienen que aceptar los medios de pago que utilicen habitualmente (tarjeta, efectivo o financiado) y mantener los mismos plazos de devolución. En el caso de las compras online, además, existe el derecho de desestimiento: un plazo de 14 días en los que se puede devolver el producto sin necesidad de alegar motivo alguno ni asumir ningún coste.
Respecto a las garantías, el ministerio recuerda que, desde el pasado 1 de enero, ya son tres los años durante los que las empresas están obligadas a reparar o sustituir el producto o servicio adquirido por el cliente en caso de disconformidad.
Durante las rebajas, cuya fecha de inicio y fin debe estar publicitada de forma visible en todo momento, los establecimientos tienen las siguientes obligaciones:
• Etiquetar los productos rebajados de forma clara y diferenciada del resto, incluyendo el precio original más el reducido o el porcentaje de descuento.
• No ofertar como productos rebajados aquellos que tengan taras o sean defectuosos.
• Disponer de stock suficiente de los productos o servicios rebajados, en función de la importancia de la publicidad realizada.
Por su parte, los consumidores deben conservar el ticket o factura de la compra, ya que será necesario para ejercer cualquier derecho de devolución o ejecución de garantía.
En caso de que se produjeran conflictos, el ministerio recomienda acudir a los servicios de Consumo de las diferentes Comunidades Autónomas, a las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMIC) de los ayuntamientos o a las juntas arbitrales de Consumo que existen por todo el territorio tanto a nivel regional como local.