Kraft Heinz ha registrado entre abril y junio unas ventas por valor de 6.554 millones de dólares, lo que supone un leve retroceso del 0,9% respecto al segundo trimestre de 2021. No obstante, obtuvo un beneficio neto atribuido de 265 millones de dólares, frente a las pérdidas de 27 millones de dólares del mismo periodo del año anterior.
En concreto, la multinacional informó en un comunicado que su facturación en Estados Unidos retrocedió un 3,1% anual, hasta los 5.039 millones de dólares, mientras que los ingresos internacionales se elevaron un 7,2% hasta los 1.515 millones de dólares. Por otro lado, señaló que debido al aumento de sus costes, tuvo que llevar a cabo una subida de precios del 12,4%.
De este modo, en los seis primeros meses del año, el grupo ha registrado un beneficio neto atribuido de 1.041 millones de dólares, un 94% más respecto a resultado contabilizado en la primera mitad de 2021.
«Entregamos otro trimestre más de sólidos resultados a medida que continuamos navegando con éxito en los obstáculos a corto plazo, gracias a los nuevos avances de nuestra estrategia a largo plazo», dijo el director ejecutivo y presidente de la junta de Kraft Heinz, Miguel Patricio.
«Aunque el entorno sigue siendo fluido, podemos anticiparnos mejor a las condiciones dinámicas, adaptarnos a este entorno en constante cambio y demostrar nuestra resiliencia frente a los nuevos desafíos. Estamos anticipando y adaptándonos a las condiciones cambiantes del mercado mientras gestionamos la inflación a través de la realización de precios y eficiencias brutas. Estoy muy orgulloso del equipo de Kraft Heinz porque, a pesar de todos los desafíos, los empleados de toda la organización continúan haciendo un gran trabajo», añadió.