El diferencial de precios de los alimentos entre la huerta y la mesa se dispara por encima del 600% por la ‘crisis del pepino, asegura la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG).
“Una vez más, la crisis la hemos pagado los eslabones más débiles de la cadena; agricultores, con pérdidas millonarias, y los consumidores, que no se han podido beneficiar de los bajos precios en el campo”, ha subrayado Miguel López, secretario general de COAG.
Los precios en destino se mantienen en niveles similares a pesar del desplome de las cotizaciones en el campo, aunque en junio, el pepino multiplicó por 24 su precio.
Así, las producciones hortícolas lideraron los márgenes más escandalosos: cebolla (1030%), patata temprana (943%), repollo (808%), tomate (791%), lechuga (760%), berenjena (745%) o calabacín (621%). En el inicio de la campaña, la fruta de verano también se ha visto afectada y el melón multiplicó por ocho su cotización de la mata a la mesa por unos precios en la huerta que no superaron los 0,25 euros/kilogramo, mientras que el melocotón, nectarina y ciruela multiplicaron por más de cinco su valor.
En el caso concreto de la ganadería, se mantiene en niveles similares a los del mes de mayo, (3,37 frente a 3,27), con la carne de ternera (355%) y la de cerdo (338%) como abanderadas de los mayores diferenciales.