Las variedades de Coca-Cola bajas en calorías y sin calorías suponen ya más del 37% del volumen de la marca. Este dato supone un indicativo del mercado pues si bien cada vez existen más opciones de bebidas sin calorías, año tras año se incrementa el número de ciudadanos que se decantan por ellas.
Hace más de 30 años que Coca-Cola Light se puso a disposición de los consumidores, pero no es hasta el año 2006, en el que se incorpora Coca-Cola Zero a las bebidas sin calorías, cuando se logra una mayor participación en la alimentación de los españoles de las bebidas sin calorías.
Todas las campañas de información sobre la composición de las bebidas, y en concreto sobre el aporte de calorías, han promovido que el consumidor español opte por este tipo de bebidas. Así, la nueva estrategia de marca única en Coca-Cola, como la extensión del color rojo para toda la gama de Coca-Cola, han permitido que el ciudadano pueda decantarse más fácilmente por Coca-Cola Zero, con la consiguiente reducción del aporte de calorías en su alimentación diaria.
La compañía lleva años realizando un notable esfuerzo en innovación, así como en la incorporación de la información de la composición nutricional para el consumidor, lo que permite que éste pueda elegir la bebida que más se adapte a sus necesidades y estilo de vida.
Este año, además, Coca-Cola España ha conseguido hacer realidad su tercer compromiso: ofrecer a los consumidores una versión baja o sin calorías de cada una de sus bebidas favoritas. Esto hace claramente que el consumidor pueda incorporar las bebidas bajas o sin calorías en su alimentación.