El resultado del ejercicio 2020 del Grupo Stef se ha visto impactado por la crisis sanitaria. En concreto, el resultado de explotación se ha reducido en un 28%, con un margen inferior en 1,3 puntos respecto al año 2019, mientras que la cifra de negocio se situó en 3.145 millones de euros, un 8,6% inferior al pasado año.
No obstante, la deuda se mantuvo relativamente estable, con un apalancamiento financiero del 111%, a pesar de las adquisiciones e inversiones significativas realizadas durante el periodo, que han alcanzado un importe total de 247 millones de euros.
Tal y como ha asegurado Stanislas Lemor, presidente director general del Grupo Stef, “2020 ha sido un año atípico, marcado por la crisis sanitaria y por sus consecuencias económicas. Nuestros resultados demuestran la solidez de los principios fundamentales del grupo ante esta situación. En nombre del Consejo de Administración deseo felicitar a nuestros colaboradores de todas las actividades del grupo que, en Francia y en el resto de países europeos, se han movilizado y han sido capaces de adaptarse y enfrentarse a la situación para así poder garantizar el abastecimiento a los consumidores. En colaboración con nuestros clientes, hemos logrado adaptar nuestro dispositivo operativo con el objetivo de mitigar el impacto de la pandemia sobre nuestros costes de producción”.
“Este año nos ha permitido reforzar nuestras posiciones en tres países del Oeste y Sur de Europa y ofrecer a nuestros clientes una mejor cobertura en Alemania, Europa Central y Europa del Norte. También hemos sido capaces de acelerar nuestra transformación, especialmente en nuevas tecnologías, alineados con las expectativas de nuestros clientes. Estas acciones permitirán al Grupo reforzar su capacidad de aportar soluciones innovadoras y adaptadas a los nuevos desafíos de la cadena de suministro post-Covid”, ha añadido.
En concreto, la división de Stef Francia ha registrado un resultado bruto de explotación de 113,6 millones de euros frente a los 127,5 del 2019. Según explica el grupo, la fuerte caída de volúmenes registrada en el primer semestre ha provocado una disminución del 5% de la cifra de negocio. El resultado de explotación se ha visto directamente afectado ya que el Grupo ha mantenido su estructura operacional para poder así responder a las necesidades de sus clientes, lo que ha generado importantes sobrecostes de producción.
Además del fuerte impacto de la crisis en las actividades del Foodservice y del Seafood, las actividades de transporte y de grupaje también se han visto afectadas por los cambios en los flujos, por el cierre de determinados sectores y los sucesivos confinamientos. Las operaciones de congelado han resistido bien, sobre todo en las actividades de almacenamiento.
El retail se ha beneficiado del retroceso del consumo en el canal Foodservice, aunque el coste de adaptación de medios para hacer frente al fuerte crecimiento de los volúmenes, en especial en el segmento del comercio electrónico, ha impactado fuertemente la rentabilidad de esta actividad.
Respecto a Stef Internacional, el resultado bruto de explotación también se vio reducido, pasado de 39,2 millones en 2019 a 29,5 al cierre de 2020. En Italia, donde las principales actividades se mantienen sólidas, el grupo ha transferido la operación de transporte y logística de Seafood a un socio colaborador especializado. España, por su parte, ha mostrado una buena resistencia impulsada por la firma de un nuevo contrato con un cliente del canal retail. Portugal por su parte, ha continuado con una buena dinámica comercial a pesar de la pérdida de un importante cliente.
Suiza ha registrado un buen año gracias al desarrollo comercial, a una mejor tasa de ocupación de los almacenes y a un éxito significativo en operaciones de comercio electrónico. A finales de año el grupo ha adquirido las actividades de Nagel-Group en Italia, Bélgica y Holanda, abriendo nuevas perspectivas para los próximos años.
Por último, la Méridionale ha hecho frente a una situación económica fuertemente desequilibrada a lo largo del año, debido a la reducción de su perímetro de actividad limitándose al servicio con los puertos departamentales de Propriano y Porto Vecchio, a la vez que sus costes fijos se mantuvieron inalterados. Esta situación se ha visto agravada por las restricciones a la circulación de pasajeros debidas a la crisis sanitaria. No obstante, la compañía aprovechó este periodo para explorar soluciones alternativas y, a finales de año, puso en marcha una nueva línea marítima entre Marsella y Tánger (Marruecos)
Perspectivas para 2021
El Grupo Stef asegura que “ha demostrado una capacidad de adaptación y de resiliencia” que le han permitido terminar el año sin lastrar sus capacidades de desarrollo e inversión. Dispone así, “de los medios necesarios para resurgir en cuanto se recuperen las condiciones apropiadas manteniendo sus objetivos de contratación de personal durante 2021”.
La integración de las actividades adquiridas recientemente, la buena dinámica comercial, así como la reciente concesión de una delegación de servicio público a la división marítima, deberían contribuir a la mejora de sus resultados. Asimismo, el Consejo de Administración ha sometido al voto de la Junta General del 29 de abril de 2021, el pago de un dividendo de 2,5 euros por acción, como complemento al anticipo de 1,5 euros abonado en 2020.
Por último, el grupo ha decidido continuar y acelerar sus planes de acción durante el 2021 al objeto de reducir el impacto de la huella medioambiental con la puesta en marcha de una ambiciosa hoja de ruta.