Las meriendas de los niños se caracterizan por su gran aporte calórico y baja calidad nutricional, según el ‘Libro Blanco sobre Meriendas Infantiles’, elaborado por un equipo de dietistas-nutricionistas, liderado por el Dr. Ramón de Cangas, e impulsado por la Asociación Española de Fabricantes de Yogur y Postres Lácteos Frescos (AEFY).
En concreto, el trabajo revela que el 94% de los menores toma algún lácteo para merendar cada tres días, siendo el yogur el alimento elegido en el 22,6% de estas comidas. Además, solo el 7,3% de los niños entre tres y seis años toma fruta y yogur, una las combinaciones más saludables para merendar.
Esta combinación no se encuentra entre las tres opciones más habituales en las meriendas para los niños de más de siete años, siendo sustituida por alimentos como leche y galletas (12,5%), un sándwich y zumo (8,9%) y leche y bollería (8,8%). Asimismo, aproximadamente el 80% de los menores de doce años meriendan, al menos, una vez a la semana, siendo mayor esta frecuencia en los niños de menos de seis años, especialmente en las regiones del sur y centro de España.
Alimentos habituales de las meriendas infantiles
En cuanto a los alimentos habituales que componen las meriendas infantiles, esta investigación señala que, en España, la opción más extendida es el bocadillo, normalmente con embutido, que los niños toman varias veces a la semana y muchos de forma diaria. En concreto, una de las fuentes (‘Valoración de la condición nutricional, y de hábitos y preferencias alimentarias en una población infantil-juvenil, de siete a 16 años, de la Comunidad de Madrid’) señala que el bocadillo con embutido está presente en la mitad de las meriendas (49,9%) mientras que la bollería y las galletas se sitúan en el 37,1%. En cuanto al yogur, el 41,4% de los niños y niñas de tres a seis años toma este alimento lácteo al menos una vez a la semana mientras que entre siete a 12 años este porcentaje se sitúa en el 32,4%.
De manera paralela, también se confirma que la calidad de los alimentos que forman parte de las meriendas infantiles va reduciéndose a medida que el niño crece, especialmente entre aquellos que toman dos o más alimentos. Igualmente, la fruta no es el alimento más elegido para merendar (presente en el 45,5% de los casos) y se indica que la mayor parte de niños españoles no llega a consumir las cinco raciones de fruta y verdura al día recomendadas.
La importancia de las meriendas
Los expertos destacan la importancia de asegurar una buena calidad energética y nutricional en las meriendas de los niños, siendo recomendable que represente, aproximadamente, el 10% del total del valor energético (calorías) que se consuman al día. Por ello, esta ingesta supone una gran oportunidad para mejorar la calidad de la dieta, incorporando alimentos con un perfil nutricional adecuado, como es el yogur.
En este sentido, según las evidencias científicas de esta investigación, se prueba que una de las mejores opciones para la merienda es elegir los alimentos recomendados en la dieta mediterránea. Así, los expertos señalan que una buena combinación sería un lácteo, como el yogur, y otros alimentos saludables, como fruta, frutos secos… y así, ayudar a cubrir los requerimientos calóricos y nutricionales necesarios para el normal crecimiento y desarrollo de los niños y niñas.
El Libro Blanco señala que el consumo adecuado de alimentos lácteos y, en particular, de yogur se asocia a una mayor calidad de la dieta. Por ello, el yogur es una buena opción para los niños y jóvenes por su contribución al valor energético total de la dieta y por su aportación de calcio y vitamina D, los cuales intervienen en la salud ósea, metabólica y función antioxidante. Igualmente, el yogur contiene bacterias ácido lácticas que ayudan a una mejor digestibilidad del alimento, además de otros beneficios como la acción inmunomoduladora. La Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC) recomienda el consumo de dos raciones de alimentos lácteos al día, siendo una ración equivalente a dos yogures naturales.
Para Antoni Bandrés, presidente de AEFY “este Libro Blanco ofrece un diagnóstico real y objetivo sobre las meriendas de los niños y niñas de España. Sus resultados nos permiten iniciar un debate sobre la necesidad de revisar los alimentos que componen las meriendas y así potenciar la recomendación de opciones tan saludables como el yogur, en el marco del compromiso de nuestra asociación por impulsar una dieta infantil nutricionalmente completa, saludable y equilibrada”. “Desde la AEFY consideramos muy relevante el consumo de yogur en las meriendas de los niños y niñas, independientemente de su situación familiar y nivel socioeconómico. Su incorporación a las meriendas infantiles como alimento habitual puede ayudar a mejorar la calidad nutricional de la dieta de todos los niños y niñas”.
En esta línea, el director del Libro Blanco, el Dr. Ramón de Cangas, señala que “la ingesta adecuada de productos lácteos y, en particular la toma de yogur, se asocia a una mayor calidad de la dieta”. “Es necesario aumentar la complementariedad entre el yogur y la fruta como una de las combinaciones más saludables posibles para las meriendas, especialmente en las de los niños más pequeños”, añade.