Risi, empresa española especializada en la fabricación de snacks y aperitivos da un paso más en sostenibilidad medioambiental y ha completado con éxito el proceso de instalación de más de 3.600 paneles fotovoltaicos situados en la cubierta de su planta de producción en la localidad madrileña de Daganzo.
Para ello ha llevado a cabo una inversión de 860.000 euros y ha contado con la ayuda de Prosolia Energy, empresa española especialista en la gestión, construcción y mantenimiento de instalaciones solares.
En total, se han instalado 3.636 paneles fotovoltaicos con una potencia de 315 Wp y un rendimiento de un 19% por panel, obteniendo en su totalidad una potencia instalada de 1.145,34 kW. En la instalación también se han utilizado unos equipos llamados «inversores», los cuales convierten la energía generada por los paneles en corriente continua, a corriente alterna. Y además, adaptan el voltaje para que pueda ser utilizado por las instalaciones de Risi.
La realización de este proyecto, cuya duración ha sido de cuatro meses, va a permitir a la empresa mejorar sus parámetros de sostenibilidad, evitando la emisión de 519.250 kg/año de CO2 a la atmósfera. Paralelamente, también va a suponer un importante ahorro económico cifrado entre 90.000 y 100.000 euros anuales en el precio de la luz.
Asimismo, con el 75% de la energía que generan estos paneles se cubre todo el consumo de la empresa. Por tanto, la sobrante se vierte a la red en forma de energía eléctrica y se vende a precio pool eléctrico. Por todo ello, el periodo de amortización de la instalación puede rondar los siete años, mientras que la vida útil de los paneles alcanza los treinta.
Eficiencia energética
“Desde siempre en Risi nos hemos preocupado mucho por la sostenibilidad y la protección del medio ambiente. De hecho, actualmente contamos con la certificación ISO 14.001 y todos nuestros procedimientos y protocolos están adaptados al cumplimiento de estrictas normas de cuidado medioambiental”, explica José Luis Arjona, director industrial de la compañía, que añade que “ahora, con la instalación de estos paneles fotovoltaicos, vamos a poder optimizar aún más nuestra eficiencia energética con las ventajas que nos aportan las energías renovables como la solar”.
Este proyecto no va a ser el único de estas características que ponga en marcha la empresa. Tras estudiar los resultados de esta instalación fotovoltaica, la compañía tiene pensado abordar en el futuro sendos proyectos similares en las otras plantas de producción que tiene en España como son la de Loeches (Madrid) y la de Marchena (Sevilla).
Toda esta estrategia se circunscribe en un proyecto empresarial mucho mayor en el que el objetivo de la compañía es ir incorporando tecnologías limpias y sostenibles no solo en el campo de las energías renovables. “También estamos enfocados en el propio ahorro energético, el uso de recursos, la gestión de residuos y el consumo eficiente con otras inversiones de mejora de tecnología en todos los ámbitos de nuestro negocio”, apunta Arjona.