Reckitt Benckiser ha entrado en números rojos en 2019 con unas pérdidas de 3.682 millones de libras, frente al beneficio neto atribuido de 2.159 millones de libras logrado el pasado año. Según ha informado la compañía en un comunicado, esta cifra se ha debido al impacto negativo de la devaluación de varios activos.
En cuanto a las ventas, el grupo británico ha cerrado el ejercicio con una cifra de negocio de 12.846 millones de libras, lo que supone un incremento del 2% respecto al 2018.
Por líneas de negocio, las ventas de la división de productos para la salud han crecido un 0,7% hasta los 7.815 millones de libras, mientras que la facturación de los productos de higiene y de limpieza de hogar han alcanzado los 5.031 millones de libras, un 4,1% más.
Al respecto, el consejero delegado del grupo, Laxman Narasimhan, ha señalado que “terminamos 2019 en línea con nuestras expectativas de crecimiento de ingresos netos y ganancias operativas ajustadas a partir de octubre, ya que nuestro negocio de higiene entregó otro desempeño estable. La salud se mantuvo débil desde la perspectiva de los ingresos netos, pero las tendencias de consumo y participación de mercado son alentadoras”.
“Nuestra estrategia será jugar en tres espacios atractivos de higiene, salud y nutrición e invertiremos en nuestra organización en consecuencia, para aprovechar tanto la escala significativa que RB tiene en los mercados clave, como también los beneficios del enfoque que ya se han demostrado en hogar”, ha añadido Narasimhan, que ha anunciado que “tenemos un plan claro para invertir 2.000 millones de libras en nuestro negocio en los próximos tres años para que esto suceda”.