Los comercios siempre han sido víctimas de pequeños o grandes hurtos, una situación que depende de varios factores, como la zona en la que se encuentre la superficie, su nivel de seguridad y el contexto social y económico del momento. De hecho, se observa un crecimiento del 0,7% en el sector retail en 2021 en comparación con el año anterior.
Grandes culpables de este dato son los acontecimientos que el país ha experimentado en los últimos años. La pandemia, unida al incremento del precio de los recursos, entre otras causas, ha conducido a la nación a una situación económica delicada. Y todo parece apuntar a que 2022 no será mucho mejor en este aspecto. Además, el aumento de movimiento social y la progresiva vuelta a la normalidad también son determinantes en este porcentaje.
Así lo exponen los expertos de Checkpoint Systems tras realizar una encuesta entre los principales retailers del panorama español, que también reconocen que el importe de los productos hurtados en sus establecimientos equivale a un 0,5% de su volumen de negocio.
Además de facilitar esta información, Emanuele Soncin, Business Unit Director de Checkpoint Systems en España, también ha querido enumerar las categorías más afectadas en este sentido en el campo de la alimentación y bebidas: vinos y licores, quesos, embutidos y, por último, cárnicos frescos. A estas se unen, como novedades en 2021, el chocolate y las cápsulas de café.
Los retos del retail respecto al hurto
“Sabemos que en el pasado era deseable, ahora es una necesidad”, explica Emanuele sobre las nuevas soluciones para evitar este problema. Un buen ejemplo de los desafíos a los que se enfrenta el retail español es el ahorro de espacio, pues debido a la pandemia, los comercios han tenido que adaptar sus instalaciones para permitir a los clientes y trabajadores mantener la distancia social.
Otro reto es lograr una omnicanalidad eficiente, de manera que el consumidor pueda tener una experiencia de compra positiva en cualquier canal de venta de una misma empresa. Asimismo, el mercado paralelo también supone un problema importante para el retail presente y futuro; es decir, la distribución de productos auténticos fuera de los canales autorizados por parte del propio fabricante. Los artículos más afectados en esta línea son las bebidas alcohólicas.
El desperdicio alimentario y la sostenibilidad son otras dos cuestiones especialmente relevantes a tener en cuenta, pues tan sólo en Europa se desperdician más de 87,6 millones de toneladas al año, siendo más del 40% de estas pérdidas debidas a una producción inadecuada.
La solución de Checkpoint Systems
Una de las soluciones que propone Checkpoint son sus antenas NEO, con las que la compañía marca un nuevo estándar de mercado del que ya se aprovechan más del 70% de sus clientes pertenecientes a la distribución alimentaria. Las antenas permiten anchos de paso de hasta 2,70 metros para lograr entradas más despejadas y una mayor detección de productos más pequeños
Sin embargo, la tecnología más innovadora es el RFreshID, gracias a la cual se puede reducir hasta un 60% el desperdicio alimentario de los retailers. Además, puede reducir entre un 50% y un 78% la mano de obra respecto a la manipulación de alimentos frescos.
Este sistema consiste en la creación e implantación de unas etiquetas especiales que, de forma automatizada, permiten conocer todo tipo de información sobre el producto: de cuántas referencias dispone el negocio, fecha de caducidad, origen, inventario, etc.
Dado que un supermercado puede llegar a gestionar hasta un millón de bandejas de producto al año aproximadamente, este sistema, basado en un sencillo escaneo de etiquetas, facilita enormemente la labor de los trabajadores de las superficies de alimentación, al mismo tiempo que ayuda a gestionar los negocios del sector en materia de sostenibilidad.
Según declara Emanuele Soncin, estos proyectos están recibiendo una muy buena acogida por parte de aquellas compañías en las que ya se están realizando pruebas piloto.