El pasado 2020 el presupuesto anual de los españoles para la compra de frescos aumentó un 14% hasta alcanzar los 2.192 euros de media por hogar, lo que supone 260 euros más que en 2019, según la tercera edición del Observatorio de frescos de Aldi 2021 cuyos resultado se han presentado este miércoles vía online.
De este modo, el consumo de productos frescos registró un crecimiento del 8,8% durante el año de la pandemia en comparación con los ligeros crecimientos (de entre el 2 y el 3%) registrados en años anteriores. Además, en su conjunto, los productos frescos representaron un 40% del gasto anual en alimentación de las familias, con una inversión total superior a los 39.000 millones de euros (en 2019 fue de 34.000 millones). De hecho, estos productos han estado presentes en un 85% de las compras realizadas por los españoles.
“La categoría de productos frescos es estratégica”, ha destacado durante el acto Ignacio Cid, Research & Analytics director de Aldi, quién ha señalado que este segmento ha sido uno de los que ha sufrido un mayor impacto por la pandemia del Covid-19. En concreto, aunque el período de confinamiento provocó una disminución de los actos de compra de productos frescos (cuatro actos menos de media por hogar que en 2019), supuso, en cambio, un aumento del gasto por compra de un 16%. En consecuencia, el precio del tique medio se incrementó en el último año hasta los 10,7 euros de media.
Analizado por productos, el informe revela que un tercio del gasto invertido en frescos se destinó a la compra de fruta y verdura (36%). De hecho, tal y como ha destacado Maria Josep Martínez-Abarca, Expert Solutions director de Kantar Worldpanel, “ésta ha sido la categoría que más ha crecido”.
En general, el consumo de las categorías de frescos subió en 2020, a excepción del pan fresco y la charcutería que experimentó una tendencia a la baja debido a los meses de confinamiento. Por su parte, la carne y el pescado frescos frenaron el descenso en el consumo que venían sufriendo desde 2013. Estos productos normalmente más consumidos fuera de casa tuvieron un repunte de consumo en el hogar debido a las restricciones sociales y de movilidad. En el caso de la carne fresca, se observa un crecimiento de casi el 10% durante el segundo trimestre de 2020 respecto al mismo período de 2019, una cifra que alcanza el 11% en el caso del pescado y el marisco.
Los mayores de 50 años, los mayores consumidores de frescos
Los mayores de 50 años son los que más productos frescos consumen, ya que lo hicieron en más de seis de cada 10 ocasiones. A medida que desciende la edad, esta cifra se reduce. El gasto en este tipo de productos también aumenta con la edad, concretamente, el 69% del gasto total en España lo realizan personas de más de 50 años. De hecho, en la franja de mayores de 65 años, esta categoría de alimentos representa el 52% del valor del tique de compra, mientras que en los menores de 35 años el dato baja hasta un 37%.
El momento preferido para consumir frescos es el almuerzo, que representa el 43% del consumo total en frescos, junto con la cena, con un 35%. Destaca el aumento de alimentos frescos en el desayuno, que pasa del 7,4% en 2019 al 8% en 2020.
En el caso de los cliente de Aldi, el informe pone de manifiesto que el 98% de las familias que compran en esta cadena de supermercados consumen frescos cada semana (un 2% más que el año pasado), frente al 96,4% de la media nacional. De acuerdo con datos propios, el 73% de los tiques de compra de sus clientes contienen productos frescos.
La calidad, la transparencia y la sostenibilidad de los frescos, claves para el consumidor
La sostenibilidad es un factor cada vez más determinante a la hora de hacer la compra. En concreto, el granel es la opción preferida en la compra de frescos (61%), especialmente para mujeres y menores de 65 años, y más del 79% valora que el envase sea sostenible y el 91%, que se reduzca el plástico que contiene.
Por otra parte, la calidad sigue siendo el factor más valorado en la compra de frescos (59% de las preferencias), aunque la relación calidad-precio se mantiene en segunda posición (51%). Los motivos que ayudan a transmitir mayor percepción de calidad son la proximidad y los certificados de denominación de origen, seguidos de las certificaciones de bienestar animal, agricultura ecológica y sostenibilidad, así como la presentación y estética.
Respecto a la transparencia en el etiquetaje de los productos frescos, más de dos terceras partes de los consumidores afirman leer la etiqueta en los supermercados antes de realizar la compra. Los españoles y españolas valora, por tanto, la información que ofrecen los supermercados en el etiquetaje y un 94% de ellos declara que ésta es un elemento importante que influye en su decisión de compra.