Kellogg Co ha registrado entre enero y marzo unas ventas de 3670 millones de dólares, lo que supone un incremento del 2,4% respecto al mismo periodo del pasado año, según ha informado la compañía.
La ventas orgánicas, que excluyen el impacto de la moneda, crecieron más del 4%. Asimismo, las ganancias operativas reportadas en el primer trimestre aumentaron un 10% interanual, ya que los impactos favorables de valor de mercado compensaron con creces la conversión adversa de la moneda y los impactos residuales del incendio y huelga de la segunda mitad de 2021 en las fábricas de cereales de América del Norte. Estos sucesos provocaron que las ventas de cereales de la compañía en esta región cayeran un 10,3% en el primer trimestre.
La compañía ha afirmado que ha tenido que aumentar los precios a los consumidores a medida que los costes se disparan, y espera que la demanda de algunos cereales se desaceleren a medida que la creciente inflación global afecte el poder adquisitivo.
También espera que la invasión rusa de Ucrania perjudique los suministros en la segunda mitad del año, ya que esa parte de Europa es una fuente importante de ingredientes para las empresas de alimentos envasados.
«Nos complace informar otro trimestre de resultados sólidos, con un comienzo de año mejor de lo que esperábamos», dijo Steve Cahillane, presidente y director ejecutivo de Kellogg Company, que añadió que «la solidez de nuestra cartera es evidente, ya que compensamos con creces el impacto en las ventas y los costes de la recuperación de la oferta de cereales en América del Norte con un impulso sostenido en el crecimiento de los snacks en todo el mundo».
«Nuestro fuerte comienzo de año, junto con el buen impulso de las ventas, nos permite afirmar la guía de ganancias incluso cuando la perspectiva ha empeorado por la inflación de costes y las interrupciones comerciales incrementales, incluidos los impactos relacionados con la guerra en Ucrania. Esto es un testimonio de nuestra estrategia, nuestra cartera y nuestra gente», ha añadido.