El valor del mercado de aditivos y complementos alimentarios mantuvo en 2022 la tendencia al alza observada 2021, favorecido por el aumento de los precios, si bien ralentizó este crecimiento. En concreto, el mercado se situó en 665 millones de euros, un 7,3% más que en 2021, frente al 12,7% registrado en el año anterior, según el Observatorio Sectorial DBK de Informa (filial de Cesce).
Cabe señalar el crecimiento de la actividad en el extranjero en los últimos años, de manera que, de la facturación total agregada de veinte de las principales empresas especializadas en el sector, el 58% correspondió a ventas en el exterior en 2021, siendo la Unión Europea el principal destino de las exportaciones de las empresas españolas, el único para gran parte de las empresas analizadas.
Según el Observatorio, las previsiones de evolución apuntan a un menor crecimiento del valor del mercado, ante la previsible moderación de los precios en el conjunto del ejercicio. De este modo, para el cierre de 2023 se estima que se podría registrar un aumento de alrededor del 2%, alcanzando los 680 millones de euros.
En el sector operan alrededor de 150 empresas con actividad relevante de fabricación o importación de aditivos y complementos para la industria alimentaria, que generan un volumen de empleo en el sector de alrededor de 1.500 trabajadores.
El mercado se encuentra integrado por un gran número de empresas de mediano y pequeño tamaño, la mayoría de ellas pertenecientes a accionistas españoles. No obstante, junto a ellas figura un reducido número de operadores de gran tamaño, muchos de ellos filiales de grandes grupos multinacionales, destacando especialmente los fabricantes y comercializadores de productos químicos.