Si el sector primario registró en 2019 un notable progreso en la implantación y el uso de la factura electrónica, 2020 fue, en cambio, un año de fuerte retroceso en el uso de esta solución tecnológica. El porcentaje sobre el total de facturas electrónicas emitidas en España durante el último año no llegan al 0,5%.
Así lo confirma el Estudio comparativo del uso de la factura electrónica en España publicado por SERES, compañía especialista en Intercambio Electrónico seguro de Documentos, que realiza un análisis de la evolución del uso de la factura electrónica en las distintas Comunidades Autónomas y sectores de actividad en España en 2020. El informe revela que el sector agrupado en torno a las actividades de agricultura y ganadería representó apenas el 1% de las empresas emisoras de facturas electrónicas en España en 2020 y el 1,3% de las entidades receptoras, representando el 0,4% de los documentos emitidos y el 0,5% de los documentos recibidos
De ese modo, el sector primario registra un notable retroceso en el uso de esta solución tecnológica respecto a 2019, año en el que agrupó al 3,6% de las empresas emisoras y al 3,6% de las receptoras, con un fuerte incremento respecto al año anterior.
En palabras del director de Marketing & Mass Market de SERES, Alberto Redondo, “el retroceso registrado en 2020 refleja claramente el impacto de la pandemia sobre el sector primario; una situación que detuvo momentáneamente la transformación que había emprendido el sector en el ámbito de la facturación digital. No obstante, una vez superado el impacto inicial, el sector vuelve a tener la oportunidad de avanzar en todos los campos de la digitalización, la sostenibilidad y la eficiencia, y en los que la factura electrónica constituye un recurso especialmente valioso”.
El sector servicios encabeza el uso de la factura electrónica con el 61,7% de los documentos emitidos y el 77,1% de los recibidos, representando el 55,8% de las empresas emisoras y el 58,5% de las receptoras. En segundo lugar, se encuentra la industria, con el 27,8% de los documentos emitidos y el 28% de los recibidos. Este sector comprende al 41,8% de las empresas emisoras y al 36,6% de las receptoras. En el sector primario se encuentra en último lugar, representando el 0,4% de los documentos emitidos y el 0,5% de los documentos recibidos.