Los países de la Unión Europea han alzando un acuerdo sobre la nueva Política Agrícola Común (PAC), que introduce una PAC más justa, ecológica y respetuosa con los animales. Comenzará a implantarse en enero de 2023 y garantizará una distribución más justa del apoyo, especialmente entre las pequeñas y medianas explotaciones agrícolas familiares y los jóvenes agricultores.
El comisario de Agricultura, Janusz Wojciechowski, asegura que “la nueva PAC combina ambiciones más elevadas en materia de medio ambiente, clima y bienestar animal con una distribución más justa de los pagos, especialmente a las explotaciones agrícolas familiares pequeñas y medianas, así como a los agricultores jóvenes. Ahora cuento con los Estados miembros para desarrollar planes estratégicos de la PAC ambiciosos que estén en línea con nuestros objetivos y que proporcionarán las herramientas adecuadas para ayudar a nuestros agricultores en la transición hacia un sistema alimentario sostenible. »
Por primera vez, la PAC incluirá la condicionalidad social, lo que significa que los beneficiarios de la PAC tendrán que respetar elementos de la legislación social y laboral europea para recibir fondos de la PAC.
La redistribución de la ayuda a los ingresos será obligatoria. Los Estados miembros redistribuirán al menos el 10% en beneficio de las explotaciones agrícolas más pequeñas y deberán describir en su plan estratégico cómo planean hacerlo.
El apoyo a los jóvenes agricultores tendrá un nuevo nivel mínimo obligatorio del 3% de los presupuestos de los Estados miembros para el apoyo a la renta de la PAC para los jóvenes agricultores (agricultores de hasta 40 años). Esto podría cubrir las ayudas a la renta, la inversión o la puesta en marcha de jóvenes agricultores.
Una PAC más ecológica
La nueva PAC apoyará la transición hacia una agricultura más sostenible con una mayor ambición por el clima, el medio ambiente y el bienestar animal. Esto permitirá la implementación a través de los Planes Estratégicos Nacionales en línea con el Green Deal y sus estrategias de la granja a la mesa y la biodiversidad. También introduce nuevas herramientas que, combinadas con la nueva forma de trabajar, permitirán un desempeño ambiental, climático y de bienestar animal más eficiente y mejor orientado.
Así, la nueva PAC integrará plenamente la legislación medioambiental y climática de la UE. Los planes de la PAC contribuirán a los objetivos de las estrategias de la granja a la mesa y de biodiversidad, y se actualizarán para tener en cuenta los cambios en la legislación climática y medioambiental del Pacto Verde Europeo.
Además, los requisitos mínimos que deben cumplir los beneficiarios de la PAC para recibir ayuda son ahora más ambiciosos. Por ejemplo, en cada finca al menos el 3% de la tierra cultivable se dedicará a la biodiversidad y elementos no productivos, con la posibilidad de recibir un apoyo a través de ecosistemas para alcanzar el 7%. Todos los humedales y turberas estarán protegidos.
Será obligatorio que los Estados miembros ofrezcan Ecoschemes, un nuevo instrumento voluntario que recompensará a los agricultores por implementar prácticas respetuosas con el clima y el medio ambiente (agricultura orgánica, agroecología o manejo integrado de plagas), así como mejoras en el bienestar animal. Los Estados miembros deben asignar al menos el 25% de su presupuesto de apoyo a la renta a los ecosistemas, un total de 48.000 millones de euros del presupuesto de pagos directos.
Al menos el 35% de los fondos de desarrollo rural se destinarán a compromisos agroambientales, que promueven prácticas ambientales, climáticas y de bienestar animal.
El presupuesto de la PAC debe contribuir significativamente al gasto climático global de la Unión. Para garantizar un cálculo realista y sólido, para 2025 la Comisión propondrá un enfoque nuevo y diferenciado que vaya más allá de los métodos existentes.
La nueva PAC introduce una nueva forma de trabajo, en la que cada Estado miembro redactará un plan estratégico nacional de la PAC que describa cómo se lograrán los objetivos de la PAC, así como los objetivos del Acuerdo Verde, tal como se describen en las Estrategias de la granja a la mesa y la biodiversidad.