El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Azafrán de La Mancha estima que la cosecha de azafrán de los productores inscritos a la DO se mantendrá esta campaña en la media de los últimos años, en torno a unos 600 kilogramos.
“A falta de unos 7-10 días para que finalice la recolección y a pesar de que la floración está siendo irregular dependiendo de las comarcas y las provincias, lo lógico es que las lluvias de estos últimos días remitan y den un empujón a los azafranales”, explica el Consejo.
“A día de hoy no hay ningún dato que indique que no vamos a tener una producción similar a la media de los últimos años, creemos que estaremos en torno a unos 600 kilogramos, más o menos como el año pasado que tuvimos una cosecha de 606 kilos. No obstante, estamos ante un cultivo muy sensible y la climatología de los últimos días puede ser decisiva”, añade el presidente de la DO Azafrán de La Mancha, Carlos Fernández.
La campaña de este año, que se inició en torno al 10 de octubre, está siendo también atípica debido a la pandemia sanitaria y a las medidas de seguridad que se están llevando en toda la cadena de producción, tanto en la recogida como en la monda de la flor y la deshidratación del azafrán. Los protocolos del sector agrario para limitar las cadenas de contacto y transmisión del coronavirus contemplan el mantenimiento de la distancia de seguridad, el uso de mascarillas, la higiene de manos y el control de la temperatura al iniciar las sesiones de trabajo, así como la ventilación.
“La cosecha en el escenario Covid-19 es una de las preocupaciones que teníamos en la DO y por eso hemos hecho mucho hincapié a nuestros asociados en la necesidad de seguir los protocolos y de extremar las precauciones. A día de hoy, la campaña se está desarrollando con normalidad y sin incidencias”, asegura Fernández.