Espuña, empresa familiar especializada en la producción de embutidos, cumple 75 años en plena forma y consolidando el modelo de éxito de la compañía. Así, la empresa espera alcanzar los 20 millones de facturación en Estados Unidos y Canadá, mercados prioritarios en su proceso de internacionalización.
De este modo, la compañía fundada en Olot en 1947, continúa con su plan de expansión internacional, con el que ha conseguido una facturación de 38,4 millones de euros y la distribución de sus productos en 45 países en todo el mundo. La empresa alcanza así tres cuartos de siglo proyectándose al futuro después que Esteve Espuña asumiera la dirección general en 2019, sustituyendo a su padre Xavier, que había ocupado esta posición desde 1975.
“A lo largo de estos 75 años, hemos trabajado la innovación y la sostenibilidad para conseguir aunar con éxito la tradición y la modernidad. Hemos consolidado así el legado de las generaciones anteriores y proyectarnos a un futuro en el que el crecimiento pasa por aumentar nuestras exportaciones, con especial foco en el mercado norteamericano, con Estados Unidos y Canadá como países prioritarios”, ha explicado Esteve Espuña, gerente de la empresa.
Actualmente, la compañía cuenta con 40 empleados en esta región y entre sus principales cadenas de distribución destaca Walmart, incorporada este año. Espuña inició su expansión en américa del norte con la filial canadiense y la posterior compra de la compañía Pata Negra Jam en 2016.
Gracias a esta operación la empresa cárnica familiar pudo empezar a exportar a los Estados Unidos a través de la incorporación de las referencias propias a la cartera de productos de la filial americana. Desde entonces, la cartera de productos de Espuña ha aumentado más de un 50%, alcanzado más de 150 referencias, con especial foco en las categorías de jamón serrano, embutidos y loncheados. Los principales focos geográficos son las regiones North East, South East y Texas.
La internacionalización, clave en el crecimiento de su negocio
Espuña ha expandido su actividad desde su fundación hasta la internacionalización actual. La compañía opera a través de filiales propias en cuatro mercados clave: EEUU, Francia, Alemania y Canadá. Desde que iniciara la exportación de sus productos a principios de los años 90, la empresa cárnica familiar ha alcanzado el 45% de su facturación en 2021en el exterior, lo que supone un incremento del 6,3% en las ventas por exportaciones respecto el ejercicio anterior.
Para Esteve Espuña, “la inauguración en 2015 de la planta de producción en la Pobla de Lillet fue un punto de inflexión en el proceso de expansión internacional de la empresa, ya que garantizaba la producción de la gama de tapas, estratégica para los mercados exteriores. Posteriormente, conseguimos la certificación USDA para toda la factoría, que autoriza a Espuña la exportación de productos adicionales de nuestra gama al mercado americano, ampliando así nuestra capacidad productiva para este mercado”.