La DO Cava ha experimentado este último año un crecimiento del 65,4% en la categoría de ecológico en cuanto a número de expediciones, encaminándose hacia su meta de lograr una producción 100% ecológica del segmento de Guarda Superior a partir de 2025.
Este dato ha quedado claro recientemente en la Barcelona Wine Week (BWW), que ha contado con la participación de expertos del sector como Pedro Ballesteros, Ferran Centelles, Sarah Jane Evans y Fernando Mora, convocados por la DO Cava para debatir hacia dónde se encamina el futuro para lograr un desarrollo sostenible del sector.
En el marco de la mesa redonda Cava 2.0: la era del desarrollo sostenible, junto con Javier Pagés, presidente de la DO Cava, han protagonizado uno de los actos más relevantes de la segunda edición de esta feria de referencia del vino español. La sostenibilidad, el enoturismo, la cultura del vino, la digitalización y la innovación han sido los temas principales.
El acto también ha servido para poner en valor el proceso llevado a cabo para implementar la nueva normativa del Consejo Regulador ya vigente, haciendo hincapié en el compromiso de la Denominación de Origen a través de la valoración del origen, amparada por la nueva zonificación y segmentación.
En este sentido, Pedro Ballesteros ha destacado que “nadie más, excepto el Cava, ha conseguido estar presente en todos los países del mundo. El Cava es un vino con historia y ahora que se habla de su origen, la gente lo aprecia mucho más porque sabe dónde nace, qué apellidos tiene y cuál es su narrativa
Asimismo, Fernando Mora ha destacado que “lo más bonito que hay en esta Denominación de Origen es el espíritu ecológico. Es una responsabilidad de todos y, además, es relativamente sencillo serlo si se hacen las cosas bien. El cuidado del viñedo con la sensibilidad por el entorno es lo que atrae al público es, sin duda, un mensaje muy potente a dar”.
La jornada también ha acogido la presentación oficial los nuevos sellos de garantía y calidad que en las botellas de Cava. Los nuevos sellos permitirán incorporar el origen, categoría, crianza y un código QR que permita al consumidor más interesado acceder fácilmente a información adicional sobre el producto, así como información de interés sobre sus mejores maridajes, o recetas más acordes con el tipo de producto.
Asimismo, con el objetivo de distinguir aquellas bodegas que realizan el prensado y la vinificación del vino base en su propiedad, se ha presentado otro de los distintivos estrella de la nueva normativa: el de elaborador integral. Con este distintivo se pone en valor la elaboración llevada a cabo de principio a fin por una misma bodega.
Javier Pagés ha señalado que la nueva normativa de la DO Cava “se trata de un proyecto salido de las inquietudes de mejora que siempre ha demostrado el sector, aprobado por unanimidad de sus actores y fundamentado en el rigor, la garantía y la transparencia para el consumidor, con el objetivo de seguir dando a conocer al mundo la calidad, diversidad y versatilidad únicas del Cava”.
Con más de un 70% de ventas internacionales, Cava es la DO española que más exporta. Reúne más de 38.000 hectáreas de viña y a más de 6.800 viticultores. Sus 370 bodegas asociadas están presentes en más de 100 países.