The Coca-Cola Company ha registrado unas ventas entre julio y septiembre de 8.652 millones de dólares, un 9% menos con respecto al mismo trimestre de 2019. Asimismo, su beneficio neto atribuido se contrajo un 33% al situarse en 1.737 millones de dólares, según revela su informe de cuentas trimestral.
Por áreas geográficas, la facturación en Norteamérica disminuyó un 9% hasta los 3.088 millones de dólares, mientras que en Europa, Oriente Próximo y África se redujo un 7%, hasta situarse en 1.693 millones de dólares.
Por otro lado, el coste de los productos vendidos fue de 3.471 millones de dólares, un 8% menos que en el mismo periodo del pasado ejercicio, mientras que los gastos de venta, generales y administrativos cayeron un 19% hasta los 2.511 millones de dólares.
En el acumulado de los nueve primeros meses del año, Coca-Cola ha registrado un beneficio neto atribuido de 6.291 millones de dólares, un 95 menos que entre enero y septiembre de 2019. La facturación en este periodo ha disminuido un 13%, situándose en 24.403 millones de dólares.
«A lo largo de la crisis de este año, nuestro sistema se ha mantenido enfocado en su estrategia de bebidas para la vida. Estamos acelerando nuestra transformación que ya estaba en marcha, dando forma a nuestra empresa para que se recupere más rápido que la recuperación económica más amplia», ha señalado James Quincey, presidente y director ejecutivo de la compañía, que ha añadido que, «si bien aún quedan muchos desafíos por delante, nuestro progreso en el trimestre me da la confianza de que estamos en el camino correcto«.