La incorporación de la fábrica de SEAT en Martorell al proceso de vacunación, tras un acuerdo entre la empresa de automoción y la Generalitat de Catalunya, es la primera experiencia de colaboración público-privada en el plan de vacunación que se lleva a cabo en todo el país. Conscientes de la importante oportunidad que ofrece este modelo, las asociaciones y las empresas de la cadena de valor del gran consumo desean reiterar a la Conselleria de Salut de la Generalitat de Catalunya su “total predisposición a sumar sus recursos al plan de vacunación para poder así inmunizar a mayor velocidad a sus profesionales”.
En opinión del sector, “la experiencia impulsada en Cataluña es una gran oportunidad de evidenciar el potencial que tienen las empresas a la hora de agilizar el proceso de vacunación, especialmente en un momento en el que crece la disponibilidad de vacunas y se requiere movilizar todos los recursos disponibles para alcanzar la inmunidad de grupo en el menor tiempo posible”.
Por ello, el gran consumo confía en que el modelo de colaboración acordado con SEAT se haga extensivo a empresas del sector en todo el país para que puedan empezar a vacunar a sus trabajadores y recuerda que, actualmente, tan solo el 1,5% de los profesionales de la cadena de valor del gran consumo han tenido acceso a las vacunas, mientras que el 30% de la población está ya inmunizada, así como la práctica totalidad de los profesionales considerados esenciales.
“El bajo nivel de acceso a las vacunas de los profesionales del sector del gran consumo es especialmente preocupante cuando el sector ha sido considerado esencial desde el inicio de la crisis sanitaria y, sin embargo, sus trabajadores han quedado relegados una vez se ha iniciado el proceso de vacunación”, señala Aecoc, que explica que ahora que el acceso a las vacunas está garantizado, considera que la incorporación de sus trabajadores al proceso de vacunación “no puede esperar más, ya que cumplen con una función esencial y, en la mayoría de casos, deben desarrollar su actividad presencialmente”.
Por eso, las empresas del gran consumo reiteran su ofrecimiento a las Comunidades Autónomas para contribuir a agilizar el proceso de vacunación ya sea a través de las mutuas, de sus servicios sanitarios o de la contratación de los medios externos necesarios para vacunar a sus trabajadores.