La cadena de distribución francesa Auchan Retail ha anunciado que prevé la eliminación de 1.088 puestos de trabajo con el fin de “adaptar su oferta y su organización a las nuevas expectativas de los consumidores y ciudadanos”.
En concreto, la empresa ha anunciado que se recortarían 1.475 empleos, 10 de los cuáles quedarían vacantes, y se crearían otros 377 empleos nuevos y ha destacado que esta decisión forma parte su proyecto Auchan 2022, lanzado en 2019, y que tiene como objetivo transformar fundamentalmente la oferta y el modelo histórico de la marca en torno a dos pilares estratégicos: convertirse en protagonista del bien, lo saludable y lo local a través de la selección y diseño de un oferta única, justa y responsable y, por otro lado, ser creador de vínculos y experiencias para mejorar la calidad de vida de los habitantes.
Así, después de una primera fase de implementación anunciada en enero de 2020, cuyos primeros resultados son tangibles, Auchan Retail France pasa a la segunda fase de su plan de transformación. Por un lado, se trata de la adecuación de la organización de los hipermercados, la cadena de mercancías y el servicio postventa. También se basa en la activación de un gran eje estratégico de desarrollo en torno a la proximidad digital, que podría permitir la creación de alrededor de 600 puestos de trabajo, tal y como ha explicado la firma en un comunicado.
El plan de transformación de Auchan Retail France implica la creación de una organización simplificada, más eficiente, reorientada en el cliente, que permita satisfacer las nuevas expectativas del consumidor y asegurar la recuperación del negocio. Esto se relacionaría con tres palancas: establecer una gestión unificada de la cadena de mercancías, desde el proveedor hasta el cliente; acelerar la digitalización de la oferta de Auchan y las rutas de compra de los clientes; y dar un nuevo paso en la transformación de su modelo operativo.
A este respecto, Jean Denis Deweine, director general de Auchan Retail France, ha señalado que “hoy nos embarcamos en la segunda etapa de nuestro plan de transformación. El impulso que se viene dando desde hace varios meses está dando unos primeros resultados alentadores, pero frágiles e insuficientes. Sin embargo, vamos en la dirección correcta, una dirección confirmada por las lecciones de la crisis sanitaria. Adaptar nuestras operaciones y organizaciones operativas y proponernos conquistar los centros urbanos a través de la proximidad digital debe permitirnos cumplir con las expectativas de los habitantes de nuestras áreas de vida y encontrar el camino del crecimiento sostenible y rentable”.